Día de derbi. Aspil-Jumpers y Osasuna Magna protagonizan este sábado el primer duelo navarro en la máxima categoría del fútbol sala masculino. Será a las 18.30 horas, en el Ciudad de Tudela de la capital ribera (retransmitido por Footters) y ambos equipos llegan a la cita en una envidiable posición, inmersos ya a estas alturas en puestos de la Copa de España, en igualdad de puntos y envueltos en una dinámica positiva tanto de juego como de resultados.
Como buen derbi, es un partido que gusta jugar. Que vale más que tres puntos. Donde las historias se cuecen no sólo en la pista, sino también en la grada. Con aficiones altamente motivadas y entregadas que viven cada gol y cada ocasión como si les fuese la vida en ello. También hay piques y roces, algo intrínseco a este tipo de enfrentamientos, si bien lo deseable es que jamás trasciendan del ámbito meramente deportivo. Porque, al fin y al cabo, un duelo regional siempre debe ser una fiesta. La celebración de que una Comunidad pequeña como Navarra tiene la fortuna de contar con dos representantes en la elite del fútbol sala.
Esta vez el escenario será Tudela. La Caldera. En la pista, dos equipos por los que seguramente muchos no apostaban al inicio de temporada para estar ahí arriba, pero que están sorprendiendo y rompiendo con todos los prejuicios. Los dos conjuntos están ahora mismo en puestos de Copa de España, por delante de otros con un –a priori– mayor potencial como Palma, Levante e Inter. Y con intenciones de no bajarse de su atalaya.
El anfitrión, el Aspil-Jumpers, es octavo con 12 puntos y buscará en este derbi seguir sumando y encadenar su cuarta victoria. Aunque no tuvo el mejor de los arranques ligueros, con derrotas frente a Inter y Valdepeñas, el triunfo con remontada épica incluida en Cartagena supuso un golpe de motivación. Y aunque posteriormente perdió ante el Palma en casa, acumula en estos momentos tres victorias consecutivas –Burela, Industrias Santa Coloma y Betis– que han devuelto la confianza a la plantilla que dirige José Lucas Mena, Pato. El objetivo ahora es no salirse del camino y no dejar escapar los puntos, menos en casa, donde sólo ha conseguido vencer a Santa Coloma.
Tras las marchas de muchos de sus pesos pesados como Javivi, Lemine o Gus –ya retirado–, el Ribera Navarra está inmerso en un proceso para encajar a las nuevas piezas de un puzle donde, eso sí, mantiene a su capitán, David García, como uno de los principales baluartes. En principio, para este partido sólo tendrá la baja de Carlos Bartolomé, quien aún no se ha recuperado de la rotura de fibras que arrastra desde hace meses y que aún no le ha permitido debutar con su nueva camiseta.
El Xota, por su parte, ocupa actualmente la séptima plaza, también con 12 puntos. El triunfo de la última jornada ante el Levante en Anaitasuna ha supuesto un chute de alegría para un equipo que, de nuevo en plena reconstrucción, está sufriendo golpes en forma de lesiones. Esta misma semana, Tony Escribano era intervenido de una rotura de ligamento lateral externo que le tendrá cuatro meses fuera de las pistas. También se prevé una recuperación larga para Bynho, lesionado en su rodilla izquierda, mientras que el portero Aitor Irujo prosigue con su rehabilitación de hombro, del que fue operado. Quien parece que pronto volverá a jugar es Fabinho, tras romperse el ligamento cruzado la pasada temporada, pero aún habrá que esperar.
Una de las fortalezas de los de Irurtzun, que jugarán como visitantes, está precisamente fuera de casa, donde aún no conocen la derrota. Después de los empates iniciales con Manzanares y ElPozo, los de Imanol Arregui vencieron a Jaén y a Fútbol Emotion Zaragoza. La única derrota vino después, en casa contra el Barça, pero lograron sobreponerse con un meritorio empate en Córdoba y el reciente triunfo ante el Levante.
La ausencia por lesión de piezas claves en el esquema del equipo ha provocado que otros jugadores asuman más protagonismo en la cancha, entre ellos los jóvenes Ion Cerviño y Josu Mendive, que están rindiendo a un buen nivel.
Antecedentes
El color verde predominó en los enfrentamientos de la pasada temporada. En la primera vuelta, y tras la polémica surgida a raíz de los positivos del Xota, el derbi se disputó el 23 de febrero en Tudela y el resultado fue de 0-1 para los de Irurtzun, con un gol de Fabinho a falta de ocho segundos. En la segunda, en Pamplona, el empate a 2 final el 25 de mayo permitió al Aspil-Jumpers lograr la permanencia.
Aunque este será el primer duelo liguero, ambos equipos ya se han enfrentado este curso. Fue en la final de la Copa Navarra, el 18 septiembre, donde el Ribera Navarra se proclamó campeón del torneo por primera vez tras vencer por 2-0.
Pasados ya todos esos capítulos, ahora toca añadir uno nuevo a la historia. Los dos equipos intentarán ser los triunfantes protagonistas, quienes se adjudiquen la victoria final. El desenlace, esta tarde en el Ciudad de Tudela.