Es fundamental revisar la audición una vez al año para poder detectar cualquier anomalía y ponerle solución para que nadie se pierda nada de lo que ocurre a su alrededor.
Nuestro oído no descansa nunca. Sin embargo, no le hacemos caso.
Sí, a diferencia de otros sentidos, que tenemos interiorizados como importantes, el oído es algo que vamos dejando. No oigo, pues subo la tele; no entiendo, pues pido que me repitan. Pero afortunadamente, poco a poco, estamos consiguiendo que la gente tenga conciencia de su importancia porque es una discapacidad invisible.
En el día de la audición apuestan por la prevención. ¿Qué importancia tiene revisar cómo oímos?
Hacemos hincapié en la prevención porque hay que atajar la pérdida auditiva. En la Clínica Coda, como profesionales, solo podemos trabajar con la parte del oído que queda sana porque la parte del oído que se va perdiendo, esa ya no la podemos recuperar. La audición solo es una y hay que aprender a cuidarla.
¿En cuántos decibelios se estipula que existe ya pérdida auditiva?
En consulta, a partir del 30 decibelios es cuando empezamos a considerar que comienza a haber un desgaste. Pero tampoco es lo mismo 30 decibelios en una frecuencia que en otra, en una persona de 40 o 50 años que está laboralmente activa, o el sonido que percibe una persona de 85, con un estilo de vida completamente diferente. Por eso hay que evaluar cada caso en particular.
¿Cuáles son los principales enemigos del oído?
La música a un volumen muy alto, durante muchas horas al día, es muy dañina. También afecta mucho a la audición los trabajadores sometidos a muchos ruido y que están expuestos durante siete u ocho horas a ruidos intensos. La audición también sufre mucho con las infecciones mal curadas, con ciertos medicamentos... O con el hecho de introducir cosas en los oídos como bastoncillos o incluso horquillas. Como decía un profesor, los oídos hay que tocarlos con los codos porque cuanto menos los toques, mejor.
Parece un problema solo de gente mayor, pero cada vez hay más gente joven que tiene dificultad para oír bien.
Como somos especialistas infantiles, vemos a muchos niños. Pero, si bien es cierto que la mayor parte de los pacientes que vienen tienen a partir de 60 o 65 años, cada vez acude a consulta más gente joven. Personas de 45 o 50 años porque afortunadamente estamos más concienciados. Quizá antes, cuando la gente tenía un problema, lo dejaba estar y ahora lo valora e intenta poner solución.
Durante la pandemia, personas que llevaban audífonos se vieron obligadas a revisárselos por la mascarilla, la mampara o la distancia social.
Aquella época de la pandemia fue un pequeño caos porque la gente con pérdida auditiva, incluso con los audífonos bien adaptados, tenía problemas por las mascarillas, la distancia social, o las pantallas. Todo eran barreras para una persona con discapacidad auditiva.
¿Han tenido que ajustar un montón de audífonos?
Sí, tuvimos que hacer muchos reajustes. Debían amplificar más para contrarrestar los decibelios que rebajaba la mascarilla o las pantallas. Lo que sí utilizamos mucho en aquella época era la opción que tienen los audífonos de que el usuario, a través de una aplicación en el móvil, pueda subir o bajar el volumen en función de sus actividades.
¿La solución más extendida para oír bien son estos aparatos?
Pero a veces incluso con los audífonos, no podemos mejorar audición y hay que valorar la intervención o realizar diferentes operaciones. Si bien es cierto que todo el tema de implantes e intervenciones las decide el otorrino.
Dicen que las personas con audífonos están estigmatizadas. Automáticamente les pone años encima.
Nadie se pone contento por tener que llevar audífonos, eso es así. Pero, por suerte, hemos conseguido que cada vez estén más disimulados. Aún así, nosotros siempre vamos a dar prioridad a la audición sobre la estética. La realidad es que cada vez se estigmatiza menos porque hay ya mucha joven que usa airpods y ves a mucha gente con auriculares.
Otro problema es el tinnitus.
Lamentablemente en el caso del tinnitus, lo único que podemos hacer con los audífonos es distraer y no en todos los casos funciona.