Aumentan los robos en chalets y casas de los pueblos alaveses

Se hacen con lo ajeno casi de manera profesional, viven de esto y llegan al territorio alavés con el único fin de robar en pisos. En las últimas semanas se ha registrado un aumento de robos en chalets y pisos de pueblos y detrás de estos robos la Ertzaintza centra su investigación en la banda de los georgianos, tal y como fuentes policiales de la investigación han confirmado a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA.

Así, según detallan las mismas fuentes, en las últimas semanas se ha registrado un notable repunte de robos en chalets y casas de pueblos, especialmente. Por la manera de trabajar y actuar en cada delito, la policía sospecha que tras estos robos se encuentra una de las bandas más activas del estado español, la banda de los georgianos que llegan por estas fechas a este territorio para hacerse con lo ajeno antes de volver a marcharse. De hecho, se mueven de provincia en provincia, saltando comunidades y con vehículos potentes "porque estos son de los que no paran ante un agente", confiesan.

'Modus operandi'

El modus operandi de estos delincuentes es siempre el mismo: en primer lugar, realizan una fase de vigilancia para comprobar qué viviendas están vacías y también se fijan en las cerraduras, que sean compatibles con las que ellos trabajan a través de técnicas como el bumping (se golpea la cerradura con una llave que tienen especial para desbloquear los cilindros) o el lockpicking (abren la puerta mediante la manipulación de los componentes internos), entre otras técnicas. Si ambos factores coinciden, llevan a cabo su fechoría. Tanto así, que según fuentes policiales consultadas por este periódico, en una misma mañana son capaces de entrar en dos o tres viviendas y robar en ellas en la menor brevedad de tiempo posible.

Todos los años desde el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco, la Ertzaintza realiza una serie de recomendaciones a los ciudadanos con el fin de evitar que se sigan produciendo robos en viviendas.

Entre esas recomendaciones, aconsejan desconfiar de las personas que acuden a las comunidades de vecinos y que, con excusas raras, tratan de obtener información acerca de las viviendas o vecinos. Ante estos casos es conveniente avisar a la Ertzaintza para detallar información sobre la persona sospechosa.

Marcadores de plástico

Además, es importante fijarse en posibles marcadores de plástico que los ladrones dejan en las puertas. Se trata de señales que suelen ser utilizadas por bandas organizadas para detectar qué casas se encuentran vacías y en qué momento. Estos marcadores se suelen colocar especialmente en las zonas menos visibles de la puerta para no llamar la atención, generalmente en la parte inferior de las puertas.

También es importante según recuerda la Ertzaintza asegurarse de cerrar siempre con llave la cerradura de acceso al domicilio, incluso cuando se está dentro y, sobre todo, por la noche. "Cerrar siempre la puerta con vuelta de llave, aunque solamente nos ausentemos unos minutos", recuerdan.

Por último, y como medida más general, se recomienda siempre mantener la puerta del portal cerrada y contestar siempre al portero automático cuando se está en casa, ya que puede ser el paso previo al robo.