Navarra

Auza (Ultzama) se recupera del desastre provocado tras la inundación

El río se desbordó este sábado y muchos de los bajos de las casas se vieron afectados por el agua
Vecinos de Auza, tras las inundaciones. Foto: Unai Beroiz

En apenas 24 horas, la tormenta torrencial que tuvo lugar en el valle de Ultzama registró un total de 149,9 litros por metro cuadrado, lo que provocó que el río se desbordara dos veces en la localidad de Auza, donde el agua llegó a alcanzar el metro de altura en algunas de las casas de los vecinos. En primera instancia, el equipo de bomberos logró achicar los desperfectos ocurridos tras las primeras precipitaciones a las 17.00 horas. Sin embargo, "era imposible hacer frente a la tormenta de las 21.00. En los 45 años que llevo en el pueblo nunca había visto algo así", ha comentado una de las vecinas de Auza.

Este segundo temporal se mantuvo hasta las 3 de la madrugada del domingo. Algunos lo han relatado como "un visto y no visto. No se podía hacer nada. Como consecuencia, muchos de los bajos de las casas quedaron inundados y muchos de los enseres, muebles y electrodomésticos se estropearon y quedaron cubiertos de lodo. "¡Cuánto dinero perdido!", se lamentaba otra vecina en un vídeo que su hija subió a las redes sociales.

Las casas más afectadas

Aunque el agua anegara varios bajos de las casas, esta situación afectó sobre todo a dos de los hogares. Con mucha pena, Vanessa Iraizoz limpiaba la zona baja de su hogar. "Era algo que no se podía evitar, pero genera mucha impotencia ver todo y no poder hacer nada. Se te cae el mundo a los pies". Vanessa ha relatado que estaban tan pendientes de que el agua no reventase la puerta principal que no se percataron de que estaba entrando por una de las ventanas. En cuanto a los objetos perdidos, su familia ha perdido muebles antiguos, productos de la huerta, el congelador y el frigorífico. "Queremos limpiarlo porque todo está hecho una porquería", ha señalado.

Vanessa Iraizoz enseña hasta dónde ha llegado el agua en su casa. Unai Beroiz

Por otro lado, ha destacado la solidaridad por parte de los vecinos, quienes desde la mañana se dedicaron a limpiar las calles del pueblo. "Ahora está todo limpio, como si no hubiera pasado nada. La gente es muy empática cuando ocurren este tipo de desgracias y siempre están dispuestos a ayudar".

En el caso de José Antonio Juanena, estuvo forcejeando durante un rato con la puerta de su casa hasta que no pudo más y entró todo el agua. "Se formó un río que se dirigía hasta la trasera de la casa. Iba a mucha fuerza", ha contado. El agua llegaba hasta su cintura y, como consecuencia del desastre, muchos de los objetos quedaron estropeados: "Muebles, electrodomésticos, cacharros y hasta herramientas. Todo para tirar", ha enumerado José Antonio con pena.

La puerta trasera de la casa de José Antonio Juanena, por donde se formó el riachuelo. Unai Beroiz

Fran Berasain, alcalde de Auza, ha explicado que los vecinos le han contado que "después de la primera tromba, el agua siguió su cauce. Se puso sacar de una de las casas, pero con la segunda fue imposible". De hecho, según Berasain, uno de los motivos que facilitaron que en el primer desbordamiento no se produjeran tantos desperfectos fue la intervención por parte de los bomberos, quienes atendieron siete emergencias. No obstante, "por la noche estaban en Irurtzun y no pudieron llegar". 

De madrugada, cuando amainó la lluvia, algunos de los habitantes salieron con el objetivo de apartar las leñas que habían quedado por las calles y que impedían la circulación del río. Este domingo, cuando ha regresado la calma, los 165 vecinos de Auza se han afanado en un auzolan con el que limpiaron las calles para recuperar el estado inicial del pueblo. "En ese sentido, todos nos hemos volcado en ayudar. A pesar de la desgracia, consuela ver lo solidaria que es la gente".

Por otro lado, una de las zonas que se ha visto más deteriorada es el paraje de Errekazabal. El alcalde ha pedido ayuda a las administraciones "porque el Concejo no va a poder hacer frente a todos estos desperfectos". 

Otras incidencias

La lluvia afecta a Irurtzun. La localidad navarra de Irurtzun sufrió este sábado dos lluvias torrenciales consecutivas. Sobre las 18.30 horas se registraron 18,8 litros por metro cuadrado en 10 minutos y 18 litros por metros cuadrado en los 10 minutos siguientes, según informa la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). En las últimas 24 horas en Irurtzun se han registrado 131,8 litros por metro cuadrado; en Irurita (Baztan) 27,2 litros por metro cuadrado; en Monteagudo 22,2 litros; en Areso 18,8 litros y en Los Arcos 16,8.

Abierto el tramo de la A-10 en Arakil. La Autovía de la Barranca (A-10) se encuentra desde ayer totalmente abierta al tráfico después de que este sábado tuviera que cortarse su carril derecho, en el kilómetro 5 en sentido Pamplona, en Arakil, por inundación. Esta carretera recuperó la normalidad en todo su recorrido a las 11.30 horas de ayer tras las afecciones provocadas por las intensas lluvias.

El tiempo. La AEMET prevé para hoy en Navarra intervalos nubosos tendiendo a nuboso, sin descartar lluvias débiles y chubascos ocasionalmente acompañados de tormenta en el tercio norte. Probables brumas y algún banco de niebla matinales. Temperaturas mínimas en descenso. De igual manera, también las máximas están en descenso ligero en el tercio norte y sin cambios significativos en el resto. Viento flojo con predominio del norte y noroeste.

23/09/2024