Azkoitia abre mañana un ciclo sobre arqueología que acabará con un homenaje a Miel Sasieta

Azkoitia – Tras acumular varios retrasos como consecuencia de la pandemia provocada por el covid-19, el edificio Elkargunea de Azkoitia finalmente acogerá esta semana unas interesantes jornadas sobre arqueología que servirán para recordar la figura y rendir un merecido homenaje al inigualable Miel Sasieta Larrañaga; junto a Julen Juaristi uno de los fundadores de Munibe Arkeologia Taldea que falleció el 20 de octubre del 2019, a los 88 años de edad, tras haber dedicado varias décadas de su vida a la realización de prospecciones arqueológicas y catas en cuevas de toda Euskal Herria.

Organizado por el grupo Munibe con la colaboración del Consistorio azkoitiarra y la Sociedad de Ciencias Aranzadi, el ciclo sobre arqueología arrancará mañana con una charla en la que el arqueólogo de Aranzadi Xabier Peñalver y el profesor de prehistoria de la UPV/EHU Joxean Mujika departirán (a las 19.00 horas) sobre las excavaciones realizadas en la cueva debarra de Praileaitz I; un yacimiento que, precisamente, fue descubierto por un grupo de Munibe taldea en el que estaba, cómo no, el recordado Miel Sasieta.

La segunda conferencia de las jornadas tendrá lugar el jueves (a las 19.00 horas) y correrá a cargo de los arqueólogos Antxoka Martínez y Sonia San José, que hablarán sobre las excavaciones realizadas a lo largo de los últimos 15 años en el poblado de la Edad de Hierro de Munoaundi.

La tercera y última charla de este novedoso ciclo tendrá lugar el sábado (a las 12.000 horas) y será impartida por Pedro Castaños, de la Sociedad de Ciencias Aranzadi. Ese día el ponente departirá sobre el yacimiento mutrikuarra de Kiputz (otro de los descubrimientos de Sasieta) y a su finalización se llevará a cabo el acto en recuerdo de Miel.

Un apasionado de la arqueología Considerado todo un referente en el mundo de la arqueología de Euskadi, Miel Sasieta será recordado como el descubridor en 1983 de Praileaitz I.

Tal y como explicaba en una entrevista concedida a este periódico en 2006, Miel se enamoró de la arqueología siendo muy joven "porque queríamos descubrir de dónde provenía la etnia vasca y aportar nuestro granito de arena a los técnicos profesionales". Acompañado por otros miembros del grupo Munibe, Sasieta contribuyó entre las décadas de los 60 y 80 del siglo pasado al descubrimiento de numerosas cuevas en la zona de Mendaro, Mutriku y Deba, "donde presumíamos que pudo vivir el hombre alternando la caza con la pesca".

Sin duda, el descubrimiento de Praileaitz fue el que mayores alegrías proporcionó a Miel, que se quedó "con la pena de que la competencia de Azpeitia se nos adelantara en el descubrimiento de la cueva de Ekain, ya que estuvimos muy cerca".