Azpeitia – Por primera vez en su historia, el viejo vertedero azpeitiarra de Lapatx, que dejó de recibir basuras en el año 2016, se encuentra inmerso en un ambicioso proceso de cambio que pretende reconvertir al viejo vertedero en un agente medioambiental para la transición ecológica.
Con ese objetivo, los responsables de la Mancomunidad de Urola Erdia y del propio vertedero están diseñando un Plan Estratégico "para definir los recursos y los proyectos necesarios para abordar los grandes retos en materia medioambiental a los que deberemos hacer frente en los próximos años".
Según explican desde la entidad comarcal, "al dejar de enterrar los residuos no terminó nada". Más bien, todo lo contrario. No en vano, "a partir de ese momento se dio inicio a un proceso de sellado del vertedero que está durando varios años (la Mancomunidad espera terminarlo para finales de este ejercicio) y al proceso para transformar el equipamiento en un agente medioambiental para la transición ecológica".
Y ese objetivo es, precisamente, el que se pretende conseguir mediante el nuevo Plan Estratégico, que contemplará la ejecución de diferentes proyectos "para disminuir el impacto en el cambio climático y avanzar en materias como la sostenibilidad, la economía circular o la transición energética".
Esos proyectos de futuro pretenden "dar respuesta a las necesidades de la ciudadanía y de todos los municipios de la comarca", explica el presidente de la Mancomunidad de Urola Erdia, Aitor Bereziartua.
El propio Bereziartua afronta "con ilusión" el futuro y considera que "es el momento para el cambio". Según sus palabras, "en los próximos años se prevén importantes retos en el ámbito medioambiental y Lapatx quiere contar con los recursos necesarios para abordarlos con garantías de éxito en esta comarca".