Pedro Azpiazu reprendió ayer jueves la actitud mostrada por la oposición para despachar cualquier posibilidad de acuerdo presupuestario, al que el consejero de Economía del Gobierno vasco no cree que se sume el PP+C’s. El dirigente jeltzale se mostró convencido de que EH Bildu se ha movido en la negociación “en clave electoral”, afeando igualmente el posicionamiento de Elkarrekin Podemos-IU, de quien considera que ha pretendido “manifestar su posición ideológica”. A expensas de que hoy concluya el plazo de presentación de enmiendas a la totalidad y de enmiendas parciales, Azpiazu explicitó no tener la sensación de que los populares, con quienes se ha reunido en tres ocasiones y que previsiblemente mostrarán su rechazo, vayan a respaldar las Cuentas ante las respectivas posturas en materia fiscal y después de que el Ejecutivo de Urkullu ya le adelantara que no iba a ceder a sus pretensiones. La intención del Gobierno, como recalcó el consejero en Radio Euskadi, es emprender una reflexión a partir del próximo enero pero sin una inmediata adopción de medidas. “Esa condición la sabían, no el PP, sino todos los partidos políticos”, recordó Azpiazu.
Desde la bancada del PP+C’s, su presidente, Carlos Iturgaiz, ya criticó que es el Ejecutivo vasco quien les “cierra la puerta” y quiere “levantarles de la mesa” descartando una bajada de impuestos. “Es hoy cuando la gente se plantea si podrá pagar la hipoteca o abrir la persiana de sus negocios. Si ese es el discurso del PNV es que están dentro de un bucle peligroso”, adelantó antes de la última cita con Azpiazu.
Respecto a la decisión de EH Bildu de abandonar la negociación, solventando el intercambio de opiniones en seis minutos, y enmendar a la totalidad el Presupuesto, Azpiazu aseguró tener claro que planteando un incremento de 450 millones de euros, así como “cambios estructurales” que “no dicen cuáles son”, significa proponer “algo fuera de lugar”. “Una cuestión es plantear, dentro del marco presupuestario, partidas razonables, que es lo que el Gobierno hizo. Venir con planteamientos de esa naturaleza, es ya pensar que no quieres el acuerdo y que vienes a romper”, aseveró. El consejero subrayó que el Presupuesto de 2023 “es parecido al de 2022, y en el del año pasado se abstuvo, por lo que dio el apoyo”. “Este año hay unas partidas en el Presupuesto que aprobamos con Bildu el año pasado, con lo cual, este año Bildu no va a votar unos Presupuestos que contiene unas partidas pactadas el año anterior. Es un contrasentido. Eso solo se entiende, no en clave de coherencia, sino en clave electoral, personal, en otra clave que no es la lógica presupuestaria”, argumentó.
“Se han bajado del acuerdo”
Azpiazu añadió que tampoco desde Elkarrekin Podemos, que anunció enmienda a la totalidad, se ha acudido buscando el consenso, porque han planteado cuestiones como “una empresa pública genereadora y comercializadora de energía”. “Eso es no saber en qué realidad estamos. Una cosa es la ideología, pero luego el Presupuesto es la ideología, tamizada por el filtro de la realidad”, ilustró el jeltzale, quien dijo tener “la impresión” de que ninguno de los grupos de la oposición deseaba el acuerdo. Azpiazu explicó que el Gobierno de Urkullu, pese a tener asegurado el apoyo a las Cuentas con los votos de PNV y PSE, creía que “si conseguía apoyos adicionales” se podía “lanzar ese mensaje de amplitud, de colaboración, de impulso de todos a estos Presupuestos”. “De una manera o de otra, todo el mundo se ha salido del marco de los Presupuestos” planteados y hemos intentado encauzar sus propuestas pero “se han bajado del acuerdo”, zanjó.
Respecto a la evolución económica, Azpiazu auguró que Euskadi no entrará en recesión, ya que no prevé que caiga la economía dos trimestres consecutivos y, “aunque eso ocurriera tenemos bases sólidas como para recuperar la actividad económica de una manera rápida”. Lakua mantiene la previsión de un 2,1% de subida del PIB, que permitirá “crear empleo en torno a 12.000 empleos y reducir aún más la tasa de paro”.