En Onda Vasca hemos estado en el Palacio Horkasitas de Balmaseda en la semana previa a la celebración del evento más emblemático de la localidad desde hace más de un siglo: su Pasión Viviente. En la tradicional representación de los últimos momentos de la vida de Jesús de Nazaret, se vuelcan unas 650 personas. "Aquí intentamos crear una familia entre todos los que participamos y salimos en este evento", asegura el director artístico, José Angel Ramón, Zarra.
Durante la noche del Jueves Santo y la mañana del Viernes Santo, las calles de Balmaseda se convierten en un escenario único donde se revive la emoción y el dramatismo de la Pasión de Jesús. Decenas de miles de personas acuden cada año a la villa encartada para presenciar un espectáculo que ha evolucionado con el tiempo, y que a lo largo de los años ha ido incorporando nuevos personajes y diálogos, alcanzando un nivel de realismo y emotividad reconocido a nivel internacional.