Vida y estilo

Bang Kwang, la temible cárcel que le espera a Daniel Sancho

Es la prisión tailandesa donde ingresan los condenados a pena de muerte y a penas de larga duración
Imagen de la entrada a la cárcel de Bang Kwang / Wutkh

La condena a cadena perpetua de Daniel Sancho supondrá un cambio de prisión para el reo. Salvo sorpresa Sancho, que ha pedido permanecer en Samui, será trasladado a la Bang Kwang, una cárcel que alberga a muchos extranjeros y a donde son trasladados los condenados a muerte o a penas de larga duración, como es el caso del hijo de Rodolfo Sancho.

La Justicia tailandesa condenó este jueves a cadena perpetua a Daniel Sancho tras haber probado que asesinó de forma premeditada al cirujano colombiano Edwin Arrieta, a principios de agosto del año pasado en la isla de Koh Phangan, en el sudeste de Tailandia, y posteriormente lo descuartizó para deshacerse del cadáver.

Durante este tiempo, el joven ha estado internado en la cárcel de Samui, que se puede considerar amable en comparación con la de Bang Kwang.

En Youtube hay vídeos que muestran las condiciones de vida en este presidio. Allí cumplen condena violadores, narcotraficantes, pederastas... Algunos de los que han pasado por esta cárcel aseguran que es directamente como "vivir en el infierno".

El 'Hilton' de las cárceles

Bang Kwang, también conocida irónicamente como el 'Hilton', está situada en la provincia de Nonthaburi, en el río Chao Phraya, a unos 7 kilómetros al norte de Bangkok. 

En los tres primeros meses de condena los presos deben ir con grilletes en las piernas y aquellos que están condenados a muerte los llevan permanentemente soldados.

Aunque fue construida para albergar a unos 3.500 presos, la realidad es que se estima que en la actualidad permanecen hacinados allí unos 8.000, lo que puede dar idea de las condiciones de vida de los reos.

Las celdas son de cuatro metros cuadrados en las que conviven entre 8 y 10 personas. Tan pequeño habitáculo les obliga a dormir unos encima de otros. Sin apenas agua ni higiene de ningún tipo.

Eso sí, los presos disponen de una cuenta donde los familiares pueden realizarles ingresos. Sancho, si finalmente es trasladado allí, podrá disponer de unos 10.000 baths semanales, al cambio unos 250 euros. El dinero es clave para poder acudir al economato e intentar llevar una vida lo más digna posible.

Lógicamente Sancho ha pedido seguir en Samui pero el magistrado del caso ha indicado que la ley no permite esa posibilidad y que la decisión no depende de él.

30/08/2024