Baskonia no se repone y Bilbao Basket vuelve a las andadas

Mal fin de semana y peores sensaciones ha dejado la jornada 27 en la fase regular de la Liga ACB para nuestro baloncesto. A la penosa imagen dada por Bilbao Basket el sábado en Fuenlabrada le siguió el domingo la derrota de Baskonia en Tenerife, lo que les hace alejarse de sus respectivos objetivos.

No consiguió reponerse la expedición baskonista del tortazo europeo tras caer el jueves en Atenas y el triunfo de Zalgiris al día siguiente en Munich. "Lo hemos notado al principio, hemos empezado muy blandos", reconocía Joan Peñarroya tras el choque disputado en el Santiago Martín de San Cristóbal de La Laguna. El liderato en solitario pasaba por la isla canaria pero se desaprovechaba la ocasión con el 83-81 favorable a las huestes de Txus Vidorreta que, por su parte, persiguen ser cabeza de serie de cara a las play-offs en detrimento de Unicaja y Joventut.

El rebote defensivo, pecado capital

Un escaso 42 por ciento en tiros de campo y la inferioridad reboteadora, 35 por 41, resultaron determinantes para volver a Gasteiz de vacío y firmar una semana negra desde el Pireo hasta las Canarias. El técnico catalán resaltaba como clave el serio problema surgido bajo el aro propio durante el último cuarto. "Han llevado la iniciativa pero siempre estábamos ahí. No voy a reprochar esfuerzo al equipo porque siempre lo ha tenido, pero de trece rebotes en nuestro aro en el último cuarto nos han cogido diez. Nos ha faltado el último esfuerzo con el rebote defensivo".

"No vamos a ser los primeros en descubrir cómo defender el bloqueo directo de Shermadini con Marcelinho, tampoco creo que hayan hecho muchos mejores números de los que acostumbran", comentaba Peñarroya en alusión a la perfecta conexión habida entre ambos para que no se les escapara el triunfo a los insulares. El brasileño firmó 21 puntos y 20 el georgiano. De bien poco sirvió la exhibición de Markus Howard con 33 puntos.

Regreso a la peor versión

Entretanto, en Bilbao queda la sensación de que se ha probado en propias carnes a lo largo de la última semana que el halago debilita. A la excelsa tarde de domingo vivida frente al Barcelona le ha seguido seis días después el incomprensible batacazo en la pista del desahuciado Fuenlabrada. Se facilitó que los madrileños se dieran una alegría y poco más, porque el 77-71 le sigue dejando a cuatro partidos de Manresa y Granada, esto es, la permanencia. Desde el 5 de noviembre llevaba sin ganar.

Precisamente de Manresa data la última victoria lejos de Miribilla. Ya han pasado cuatro meses de aquel 76-86, última vez que se volvió a Bilbao con una sonrisa. Desde entonces, y contando Europa, diez desplazamientos baldíos. Lo del Fernando Martín, pese a comenzar el primer cuarto ganando, 19-25, fue de sacar los colores, con un decisivo 21-10 en el tercero de los parciales.

"El tercer cuarto ha sido horrible. Ni los que han empezado ni los que han entrado han dado el nivel competitivo adecuado y hemos perdido. Lamentarnos de que no hemos entendido que esta competición, si no das el cien por cien sin dudas, con convicción y energía, no ganas". Así justificaba Jaume Ponsarnau el impropio rendimiento de sus hombres. Álex Reyes hizo 19 puntos, Emir Sulejmanovic 13 y Nikola Radicevic 12, además de propinar ocho asistencias. Del resto no se tuvo noticias en la aciaga visita fuenlabreña que impide acercarse al octavo puesto que ocupa el Valencia, próximo rival, que queda a dos partidos.