El pasado 1 de octubre Euskadi asumió la competencia de prisiones y ocho meses después ya se han dado pasos en el cambio que el Gobierno Vasco quiere implantar. La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal recuerda que la esta competencia es "compleja, importante, sensible y muy política" y requiere por tanto su tiempo para poder implantar el modelo penitenciario vasco.
Interés por la justicia restaurativa
Sin duda una de sus señas de identidad es y va a ser la justicia restaurativa. "Ya estamos informando en los centros penitenciarios y vemos interés. Lo ven como algo que les puede ayudar", subraya. Eso sí Artolazabal ha querido dejar claro que no estamos hablando de una cuestión que de beneficios penitenciarios. "Tiene que beneficiar sobre todo a las víctimas, no hacemos nada si ella no quiere. Le obliga al victimario a reconocer el delito e implica a la sociedad. Si la victima se resarce, si el victimario pide perdón, la sociedad sale ganando sí o sí", remarca.
Recuerda la consejera que este tipo de iniciativas se llevan a cabo sin importar el delito. "No soy ingenua. Soy consciente de que los presos de ETA generan una expectación especial. Tenemos en cuenta diferentes situaciones de los presos pero no segregamos. Todas las personas tendrán las mismas oportunidades y obligaciones", aclara.
"Tenemos muchos retos, lo que necesito es un poco de paciencia, de tiempo, de no confrontación estéril, de no palos en las ruedas, de intentar aportar, de sumar", destaca y considera que se están cumpliendo los objetivos que son "modestos" de momento ya que no ha habido demasiado tiempo.
Refugiados ucranianos
Euskadi ha sido uno de los países receptores de los refugiados ucranianos. Son 2.800 los que en estos momentos están en la CAV según los datos que maneja el Gobierno Vasco que aclara que el dato se está estabilizando. "Muchos quieren volver a casa", reconoce porque son varios los que están regresando a Ucrania.
Sin embargo y respecto a los que quedan, el Gobierno Vasco defiende el arraigo de muchas de esas personas con el colectivo ucraniano que ya vivía en Euskadi. Es uno de los argumentos del Ejecutivo ante el Ministerio de Migraciones de José Luis Escrivá con quien tiene abierto un conflicto en torno al parque de pisos para los refugiados. Ayer le remitió una propuesta. "La idea es que el que quiera seguir en Euskadi pueda continuar", explica Beatriz Artolazabal. "Tenemos una discrepancia con el Ministerio. Queremos solventarla". De momento confirma que no han recibido respuesta.
"El modelo es un modelo único competencia del Estado", explica pero entiende que esta situación requiere una solución excepcional para estos refugiados. "Simplemente les decimos, déjame que acabe su proceso. Llevan tiempo en Euskadi para que puedan seguir aquí. No significa que haya problema si el Estado necesita colaboración para que de otra comunidad se trasladen a Euskadi. Les vamos a atender", afirma pero añade, "ya hemos hecho un trabajo y que se rompa el proceso de integración para que vayan a la Comunidad Valenciana donde igual no tienen vínculo..... Es una cuestión de humanidad", afirma. Pide no revictimizar de nuevo a estas familias.