No ha podido comenzar mejor la Main Round de la EHF European League para Bidasoa. Pintaban bastos cuando la visita del Benfica se acercaba al descanso y se perdía por 7-12. Pero, una vez más, el embrujo de Artaleku y el no dar nada por perdido de este colectivo propiciaron otra mágica noche que conllevó la remontada y el 28-27 final que le concede, aún con tres partidos más por jugar, el derecho de llegar cuando menos a una ronda más. Está claro. Esta temporada, también, en Europa se va muy en serio.
El trabajado y merecido triunfo, facilitado en cierta medida por la roja que veía Miguel Sánchez-Migallón tras tres exclusiones con más de un cuarto de hora por jugar, deja a los auriazules como líderes en solitario y seis puntos de ventaja sobre el Ystads sueco, que cierra la tabla al caer en casa ante el Limoges (32-36), de manera que ya no va a alcanzar a los de Álex Mozas en la tabla de esta ronda principal.
Ese primer puesto estará en juego, o al menos en entredicho, si los franceses consiguen hacerse con el triunfo en su pista el martes próximo a partir de las 20.45 horas. Ante más de 1.700 gargantas, los irundarras, regresados de Lanzarote y de disputar la semifinal de la Copa España tras un gran encuentro ante el FC Barcelona, demostraron ser de nuevo un bloque fiable y unido que no renuncia al éxito hasta el último segundo por muy mal que esté el panorama. El más claro ejemplo de ello es Iñaki Cavero. Nunca le tiembla el pulso al extremo desde los siete metros, y se erigió en el máximo goleador del equipo, con seis, muy lejos, aunque de poco les sirviera a los lisboetas, de los trece que llegó a firmar el alemán Ole Rahmel.
Antes de la cita en suelo galo, Bidasoa vuelve a tener enfrente, ahora en la Liga ASOBAL, al Barça. Será en el Palau Blaugrana este sábado a partir de las siete de la tarde.