Bidebarrieta acoge el acto de clausura del curso académico 2021-2022 de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao

ELLOS y ellas, tan cercanos a los barrancos de la enfermedad y tan próximos a los refugios de la salud, donde uno coge aire para esa ascensión que es el vivir, lo saben mejor que nadie: la salud es la unidad que da valor a todos los ceros de la vida. Ellas y ellos, familia todos de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao que preside Ricardo Franco Vicario, llevan consigo una mochila para la expedición, cargada de conocimiento científico, destreza técnica y habilidades para los cuidados de la salud. Lo recordamos hoy, recién llegados de la biblioteca de Bidebarrieta, donde ayer se celebró el acto institucional de clausura del curso académico 2021-2022 de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao. No fue una ceremonia cualquiera si se tiene en cuenta que la institución goza de una salud encomiable o de hierro, ya que hablamos de Bilbao: acaban de celebrar 127 años de vida. ¡Ni que fuesen los descendientes de Matusalén!

En su académico, florido y humanista discurso, Ricardo recordó un curso del que puede decirse que ya vio algo de luz tras las tinieblas de la pandemia tan reciente. Dio la palabra a la teniente alcalde y concejala de Salud, Yolanda Díaz; y a la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, antes de que invocase a los dioses de los nombamientos y las gratitudes. No en vano, en la cita se nombraron 63 nuevas voces académicas, se presentaron seis nuevos presidentes de sección (Monike de Miguel asume el mando de la sección de Farmacia Hospitalaria; José Manuel Llamazares, de la sección de Medicina Familiar y Comunitaria; Alberto Ojanguren, ayer ausente, de la sección de Medicina del Trabajo; José María Losada, de la sección de Neurología; José Andrés Martín, de la sección de la Salud Mental; y Medelin Ocejo, de la sección de Veterinaria, al aparato...); se entregaron 12 diplomas de formación Industria de Ingeniería de la Salud y el Bienestar (un paso al frente Kepa Acevedo, David Arranz, Joseba Castro, Ainhoa Fuertes, Alejandro Herrero, María Paz Llamazares, Carlos Marcos, Carlos Marcos, Horacio Martínez, Nagore Momoitio, Ismael Pérez y Ainhoa Pérez... ) y se nombraron 23 Académicos de Honor al cumplirse ya 40 años de servicios en este cuerpo. Con ustedes, Juan Antonio Abeijón, Inmaculada Amieva, Alfredo Arcocha, Javier Arrieta, Juan Balmaseda, José Eulalio Bárcena, María Jesús Berro, Carmen de La Hoz, Victor Echenagusia, Sabino Ellauri, Pedro Ensunza, Luis Estrade, Rosa Fernández, Juan Carlos Gómez, Juan José Gómez, Joaquín Losada, José Ramón Mancisidor, Rosa Inés Muñoz, Antonio Omiste, Alfredo Rodríguez-Antigüedad, Ana I. Zorrilla y Joseba Zugadi, hombres y mujeres volcados en la pelea desde hace cuatro décadas.

Ese mismo empeño han puesto en su carrera las distinciones de honor que se llevaron un sinfín de parabienes. Julen Ocharan –no pudo acudir....– y Gorka Pérez-Yarza (Medicina), Antonio del Barrio (Farmacia), Fernando Hernando (Biología), Julián Aguirrezabal (Odontología) y Francisco L. Dehesa (Veterinaria) fueron los elegidos en una tarde por la que también desfilaron, entre otros, el vicerrector de Desarrollo Científico-Social y Transferencia de la Universidad Pública del País Vasco (UPV/EHU), Guillermo Quindós; y la vicepresidenta de la Academia de Ciencias Médicas y de la Salud Catalano-Balear, María Dolors Sintes; Mercè Balcells; el director de Planificación del Gobierno vasco, Mikel Sánchez; el secretario del Colegio de Médicos de Bizkaia (CMB), Juan Gondra;Juan Uriarte, Juan del Arco, la presidenta del Colegio de Biólogos de Euskadi, Isabel Tejada; la presidenta del Colegio de Dentistas de Bizkaia, Agurtzane Meruelo, Álvaro Mateos; Víctor Peña; la presidenta del Colegio de Enfermería de Bizkaia, María José García Etxaniz; Juan José Zarranz, Ramón Juste, Víctor Echenagusia, y Elixabete Undabeitia entre otra gente. l