El Ayuntamiento de Bilbao, tras un exhaustivo análisis, eliminará las antiguas parrillas de las áreas de recreo del Anillo Verde de la ciudad y generará nuevos espacios, seguros y delimitados, que posibilitarán la realización de barbacoas.
Un proyecto al que se dará inicio esta misma semana con un triple objetivo: renovar las infraestructuras para el encendido de fuego; generar espacios delimitados para el encendido de fuego; y, garantizar la seguridad contra incendios en las áreas de recreo.
La Ordenanza Municipal de Zonas Verdes indica expresamente que en Bilbao podrá hacerse fuego "solo en los lugares reservados al efecto y expresamente autorizados, teniéndose en cuenta las normas que señalen las autoridades competentes en función de la época y estado de la vegetación". Asimismo explicita que "es obligación de la persona usuaria el apagar las brasas resultantes antes del abandono del lugar".
Bilbao carecía por tanto de lugares idóneos reservados a tal efecto tras el desmantelamiento parcial de las barbacoas de los merenderos de uno público en torno a 2005. Fueron demolidas las paredes de las mismas pero no se eliminó sus estructuras inferiores de piedra u hormigón. Existen, en estas condiciones, un total de 33 parrillas repartidas de forma desigual en diferentes áreas de recreo. Los núcleos con un mayor número de ellas son Arraiz, donde existen quince; y catorce hay en Iturritxualde. El resto se encuentran en Atxokorre (dos), Mendigana (una) y Pastorekorta (una).
Estaban muy dispersas, abarcando superficies muy amplias y repartidas de modo individual, lo cual –mientras estuvieron funcionando– complicaba los trabajos de limpieza y mantenimiento y multiplicaba los riesgos potenciales asociados a estas actividades.
Es por ello, que el Ayuntamiento procederá a derribar estas infraestructuras para, a continuación, generar otros espacios claramente delimitados, donde concentrará las parrillas.
Estos espacios serán señalizados de forma clara e inequívoca como lugares acondicionados para hacer fuego. Permanecerán separados físicamente del resto del espacio de esparcimiento mediante muros que contarán con dos puertas de acceso.
Cubiertas metálicas para evitar que vuelen brasas
Además de la nueva distribución, sus características y configuración contribuirán también a evitar siniestros. En primer lugar, la solera será de hormigón y tendrá una amplitud suficiente en torno a las barbacoas, de cara a evitar que las chispas o las brasas lleguen a la zona verde.
Con el mismo fin, se implantarán cubiertas metálicas sobre los fuegos, que detendrán las partículas incandescentes que arrastren las corrientes de aire.
Los recintos de parrillas contarán, además, con una fuente en su interior.
Dos islas de barbacoas, 22 parrillas
Las nuevas parrillas se concentrarán en dos únicos espacios del Anillo Verde. En concreto, en las áreas recreativas de Arraiz e Iturritxualde.
En Arraiz, se generará una isla de doce barbacoas; con dos filas de seis, cada una. Tendrán una altura de 1,60 metros, una anchura interior de 80 centímetros y un fondo de 60 centrímetros, en el que se insertará una parrilla móvil de fundición de hierro. Y, sobre ellas, una cubierta de metal.
Mientras, en Iturritxualde se habilitará una isla con diez barbacoas (dos filas de cinco), con las mismas características que las anteriores.
En las áreas de Pastorekorta, Atxokorre y Mendigana se eliminarán las estructuras de las parrillas antiguas pero no se implantará ninguna nueva de momento.