El Ayuntamiento de Bilbao se encuentra inmerso en un proyecto piloto para valorar un cambio en los modelos de contenedores de basura distribuidos por la ciudad, según adelantó ayer el alcalde de la villa, Juan Mari Aburto.
El primer edil visitó ayer las obras finalizadas de la modernización de la calle San Francisco y la asociación de vecinos hizo patente su malestar por la colocación de 17 depósitos de diferentes fracciones de basura en apenas 250 metros, “con lo que de falta de visibilidad y seguridad supone”, indicaron. Los vecinos pidieron su retirada.
Aburto especificó a preguntas de los periodistas que los contenedores son “un servicio publico y es necesario en todas la calles de Bilbao”. El alcalde recordó que tal y como quedo recogido en el pleno del pasado jueves “tenemos un plan piloto para instalar contenedores más pequeños y que su impacto visual sea menor. En función de como se desarrolle ese plan veremos si es posible generalizar este servicio al resto de la ciudad”.
Así mismo, concretó que “es importante que el impacto visual de cara sobre todo al comercio local no tenga ese efecto negativo que pueden tener si los locales quedan invisibilizados detrás de los contenedores”.
Según indicó en el pleno el concejal Kepa Odriozola desde 2021 se están ensayando en los barrios de Deusto y San Ignacio diferentes modelos de distintos fabricantes analizando criterios como su uso y vaciado, estética, impacto visual y mantenimiento.