El rechazo a que gobiernen PP y Vox en el Estado es un poderoso factor para aglutinar a una mayoría progresista, vasca y catalana en torno a la investidura de Pedro Sánchez. No obstante, el socialista ha dejado tan tocadas las relaciones con PNV y ERC por el incumplimiento de los acuerdos en la última legislatura, que estos dos partidos han puesto ya sobre la mesa sus condiciones para brindarle su respaldo, y además ambas formaciones han visto cómo se resiente su nivel de respaldos en las elecciones. Sánchez también necesita la abstención de Junts, y su respaldo es aún más difícil. Todos le piden soluciones para Euskadi y Catalunya. En este contexto, EH Bildu dio ayer lunes un pequeño respiro a Sánchez al declarar que su prioridad es evitar un Gobierno del PP y Vox, y no concretar sus exigencias para respaldar al socialista.
“Hemos escuchado a nuestro pueblo. Tenemos muy claro lo que nos ha dicho. Nos dice que nuestra utilidad debe ser esta. Está claro que defenderemos los derechos nacionales y sociales, pero la prioridad, si está en nuestra mano, es que la derecha y la ultraderecha no gobiernen. En nosotros no hay especulación ni equidistancia”, zanjó.
El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, compareció ayer en Donostia para valorar los resultados electorales de la coalición, que se quedó a mil votos del PNV en la comunidad autónoma vasca y, en el cómputo global con Nafarroa, supera en número de votos y en un escaño a la suma de los jeltzales y Geroa Bai. Otegi defendió que han mejorado el número de votos logrado por Amaiur en 2011 (esto es así si se suma lo obtenido por la izquierda aber-tzale en CAV y Nafarroa), y cree que ya existe una tendencia “estructural” en virtud de la cual, aunque la abstención suba, Bildu también sube. Lo presentó como un mérito aunque el PNV, por el contrario, cree que es precisamente la abstención la que beneficia a Bildu porque su electorado es muy fiel y la sigue votando, de ahí que, con un número de votos similar, consiga grandes niveles de representación institucional.
Según la lectura de Bildu, estos resultados los ha conseguido por haberse alineado con los deseos de la sociedad vasca y su rechazo a un Gobierno PP-Vox. La coalición sigue ahora con esa estrategia que ya provocó momentos de tensión con el PNV, a quien acusó de tener una posición de equidistancia con el PP para presentarse como el único freno de la derecha. De las referencias de Otegi a la “equidistancia” se deduce que Bildu mantiene ese mismo discurso, lo que le permite posicionarse ante una hipotética repetición de las elecciones generales.
Bildu se desmarca de la presión a Sánchez tras una legislatura en la que también se ha presentado como un rostro amable para el PSOE, lo que le valió los reproches del PNV, que cree que prioriza el perfil de izquierdas frente al autogobierno en debates como la Ley de Vivienda. A Otegi se le preguntó ayer por la situación en Catalunya, e insistió en que la prioridad para él es frenar a la derecha y la ultraderecha.
Otegi comenzó la comparecencia asegurando que “nuestro pueblo no quiere un gobierno PP-Vox”, y que por esa razón, por un lado, la ciudadanía votó a los socialistas vascos y navarros como un voto coyuntural, instrumental, motivado por el miedo, para frenar a la derecha. Por otro lado, aseguró que la ciudadanía premió a EH Bildu porque tiene la misma prioridad. “El partido debería leer bien este resultado”, recalcó, para añadir que en muchas ocasiones se dice que la gente tiene la palabra y, por tanto, hay que entender y cumplir su mensaje.
Otegi ve “una ventana de oportunidad para una alternativa”, aunque admitió las “grandes dificultades”. “Pero el pueblo vasco no quiere de ninguna de las maneras que el bloque reaccionario gobierne el Estado español. Este es su mensaje rotundo”, dijo, para añadir que Bildu “no especula” y cumplirá “su palabra”. “Hemos dicho durante la campaña que, si depende de Bildu, la balanza se inclinará hacia la izquierda y la soberanía. Nuestro pueblo ha hablado alto y claro, lo escuchamos, y no vamos a fallar a nuestra palabra ni a nuestro pueblo”, sentenció.