La Diputación Foral de Bizkaia, ha acordado esta mañana en su Consejo de gobierno semanal, la activación de un dispositivo asistencial de emergencia para intentar "descongestionar" su red de atención a menores extranjeros no acompañados (menas) que "se encuentra al límite". Esta medida permite además, incorporar profesionales diferentes: "figuras educativas, asistenciales tanto sanitarias como sociales, y auxiliares".
Se atiende a 602 menores, de media 3 nuevos al día
Actualmente Bizkaia cuenta con 16 centros de acogida que atienden a 602 menores migrantes no acompañados, una cifra que viene "creciendo de manera exponencial en los últimos meses". A pesar de que en el último año la Diputación ha abierto cuatro nuevos centros, la situación es límite, por la llegada de una media de tres menores al día, con previsión de que este flujo de llegada de menas desde Canaria se mantenga.
La portavoz foral de Bizkaia, Leixuri Arrizabalaga, ha reiterado el "compromiso con la protección de niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad", pero reconoce que hay "serias dificultades para garantizar proyectos socioeducativos que favorezcan la integración de estos menores en la sociedad".
La diputada general, Elixabete Etxanobe, ya advirtió el pasado mes de septiembre en Gernika, en el Pleno de Política General de Bizkaia, que la situación era insostenible con los centros forales saturados, y la institución insiste hoy de nuevo en la necesidad de que el Gobierno de España asuma un "papel activo en esta crisis humanitaria", y adopte cuanto artes "medidas estructurales que controlen los flujos migratorios y establezcan un reparto justo y equitativo de responsabilidades entre los territorios". En este sentido, Arrizabalaga, apelaba también a las comunidades autónomas para que asuman su parte y no eludan su responsabilidad en esta crisis humanitaria.
Obligación legal y compromiso con la protección de personas menores
La Diputación Foral de Bizkaia subraya que su compromiso con la protección de niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad es ineludible y que, además de tratarse de una obligación legal, responde a una convicción firme. No obstante, reconoce las serias dificultades para garantizar proyectos socioeducativos que favorezcan la integración de estos menores en la sociedad.
Bizkaia continuará garantizando la acogida y protección de menores migrantes no acompañados, pero advierte que se necesitan soluciones estructurales y una corresponsabilidad efectiva para afrontar una situación que, de no atenderse, continuará agravándose.
(Noticia en Elaboración)