El donostiarra Darío Brizuela contribuyó ayer con 18 puntos a la victoria de España contra Montenegro, en un duelo dominado de principio a fin (65-82) por los de Scario, que consiguieron la clasificación matemática para los cruces de octavos de final. El día de descanso le vino bien al equipo estatal que salió a pista con la energía renovada, con la agresividad defensiva que demostró en las dos primeras jornadas del Eurobasket y con la clara indicación de jugar rápido en ataque, siendo más vertical al aro contrario.
Tras los primeros minutos de adecuación al partido, el dominio del rebote comenzó a dar réditos a los españoles, que a los 7.45 minutos alcanzaron la decena de puntos de diferencia, 13-23. En el segundo cuarto, Juancho Hernángomez y Dario Brizuela (este con tres triples) ejercieron de francotiradores efectivos desde la larga distancia en los primeros cuatro minutos, elevando la renta hasta la veintena de puntos, 22-42.
A partir de entonces, el combinado balcánico jugó todo el partido a remolque, sin conseguir inquietar a España. Los de Scariolo miran ya a la siguiente fase del torneo, la de las eliminatorias.