La Comisión Europea ha vuelto a pedir explicaciones a Francia por el bloqueo de carreteras y los ataques de sus agricultores contra los transportistas españoles en la frontera con ese país, y ha avisado de que tomará medidas si es necesario.
A raíz de una petición de las autoridades españolas, el pasado 26 de enero el Ejecutivo comunitario solicitó al Gobierno francés información sobre las perturbaciones en carreteras y autovías y sobre las medidas que prevé para facilitar la libre circulación de mercancías en el mercado europeo.
"La Comisión es consciente de las quejas generalizadas en la comunidad agrícola y está trabajando con los Estados miembros y las partes interesadas para abordarlas como una prioridad. Sin embargo, esto no es excusa para obstaculizar o destruir los productos de otros agricultores de otros Estados miembros", dijo hoy una portavoz del Ejecutivo comunitario.
Recordó que los tratados de la UE obligan a los Estados miembros a tomar "todas las medidas necesarias y proporcionadas para asegurar la libertad de mercancías en su territorio" cuando existe algún obstáculo.
"La Comisión evaluará la respuesta de Francia y tomará las medidas apropiadas si es necesario", dijo.
Es la segunda vez que la Comisión Europea pide explicaciones a las autoridades francesas por este motivo en apenas medio año, ya que en octubre pasado les envió una carta por incidentes similares en municipios cercanos a la frontera española.
En aquella ocasión, estas respondieron que habían adoptado rápidamente las medidas necesarias para poner fin a los actos de vandalismo que estaban ocasionando daños.
También señalaron entonces que la gendarmería francesa había iniciado una investigación a raíz de las denuncias de varios conductores, según recordó el comisario de Mercado Interior, Thierry Breton, en una respuesta publicada a principios de enero a preguntas planteadas por eurodiputados españoles conservadores, socialistas y liberales.
Esta segunda llamada de atención se produce después de que, tras semanas de protestas y ataques a camiones extranjeros, el primer ministro francés, Gabriel Attal, asegurase el domingo que pondrá en marcha "nuevas medidas" para contrarrestar lo que ve una "competencia desleal" por parte de los agricultores extranjeros que venden en Francia.
Bruselas, sin embargo, prefiere no conjeturar sobre a qué se refería exactamente el primer ministro francés al hablar de una supuesta competencia desleal por parte de otros Estados miembros de la UE, pero se inclina por pensar que se refería a las diferentes regulaciones nacionales en materia, por ejemplo, de uso de pesticidas.
En esta línea, desde el Ejecutivo comunitario se insiste en que no hay un ángulo específico en materia de legislación de competencia en las palabras de Attal, como sucedería si las críticas se refiriesen a la existencia de ayudas públicas desorbitadas para el sector agrario.