PSOE y PP volverán a reunirse bajo la mediación del comisario de Justicia, Didier Reynders, en Bruselas el próximo 12 de febrero, en la que será la segunda reunión tutelada por la Comisión Europea para tratar de desbloquear la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Tras el encuentro de ayer, que duró hora y media, y en la que el partido de Alberto Núñez Feijóo quiso poner sobre la mesa, sin éxito, la ley de amnistía, el comisario europeo recordó a las partes la “importancia de establecer un diálogo constructivo” y la necesidad de “proceder a la renovación del CGPJ con carácter prioritario e iniciar, inmediatamente después, un proceso con vistas a adaptar el nombramiento de sus jueces-miembros, teniendo en cuenta los estándares europeos relativos a los Consejos del Poder Judicial”.
Al término de la cita, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, señaló que la reunión fue “constructiva” aunque evitó aportar detalles sobre los temas que se discutieron y los avances que se hubieran podido producir. “Vamos a ser muy discretos en las conversaciones que mantengamos y cuando tengamos acuerdo lo haremos público”, indicó el dirigente socialista. Consideró además que esta puede ser la “última oportunidad” de recuperar la normalidad en este órgano. “Por nosotros, desde luego, no va a quedar”, apostilló, confiando en que todos los actores estén “a la altura” porque a su juicio resulta esencial renovar el Consejo y recuperar la normalidad institucional en el Poder Judicial. El ministro tampoco quiso dar detalles sobre la metodología de trabajo que van a seguir a partir de ahora y volvió a apelar a la discreción. “Espero que me entiendan, vamos a ser discretos en la metodoloía de trabajo, en cómo vamos a llevar a cabo la negociación y cuando haya acuerdos los haremos públicos”, resumió.
Sin embargo, el vicesecretario Institucional del PP, Esteban González Pons, se mostró “muy pesimista” sobre las perspectivas de entendimiento con el Gobierno de Pedro Sánchez porque “lo primero que sacrifica” en negociaciones en su interés “es la independencia del Poder Judicial”, si bien dijo salir “satisfecho” del primer encuentro con Reynders y Bolaños porque “ha cumplido las expectativas” del PP. Explicó que el objetivo es un “diálogo amplio” del que espera que permita resolver “más cosas además de la renovación del Consejo”. El dirigente popular apeló a la discreción para no entrar en los detalles de la discusión pero quiso dejar claro que en el PP son “ambiciosos” y que la ley de amnistía en curso de tramitación “influye” en esta negociación, en tanto que se trata de una ley que “está deslegitimando el Poder Judicial”. También avisó de que el marco de la negociación son los informes anuales de la Comisión Europa sobre el Estado de derecho y que “nada está acordado hasta que todo esté acordado”, al tiempo que afirmó haber recibido “suficientes garantías” con respecto a las demandas del PP para aguantar esta negociación “como mínimo unas semanas más”.