¿Necesitas un planazo para un fin de semana? Da igual si vas en pareja, cuadrilla o con la chavalería. Cabárceno, que lejos de ser un zoológico tradicional, exhibe orgulloso su marchamo de ariete turístico y educacional, te espera, a poco tiempo de Bizkaia, para que disfrutes de más de un centenar de animales en régimen de semilibertad y de sus exhibiciones.
Recurso turístico natural y educativo de primer nivel y situado a tan solo 20 kilómetros de Santander, a poco más de una hora en coche desde Bilbao, el Parque de la Naturaleza de Cabárceno acoge a casi 120 especies animales de los cinco continentes que viven en régimen de semilibertad, distribuidas en recintos de grandes superficies donde coexisten una o varias especies.
“No es un zoológico convencional ni un parque natural. Es un espacio naturalizado por la mano del hombre, a partir de la belleza primitiva de su paisaje kárstico, sobre las 750 hectáreas de una antigua explotación minera a cielo abierto”, explican desde el parque, que ofrece a los animales “la vida más natural posible”, ya que, a excepción de la alimentación, que se les facilita, el resto de las actividades están marcadas por su casi total libertad e instinto.
Diurnos y nocturnos, de todos los continentes, del mar, montaña, selva, llanura, desierto, reptiles, mamíferos, hervíboros… Prácticamente todos ellos desencadenan peleas y luchas en época de celo por el control de las hembras y desde luego, salvo el instinto de supervivencia, el resto de sus sentidos son tan salvajes como en su hábitat natural.
Además de las ya recuperadas exhibiciones de aves de cetrería, el visitante, especialmente los txikis, disfrutarán de la visión de camellos y dromedarios, emús, búfalos, cebras, leones, rinocerontes, avestruces, hipopótamos, osos pardos, hipopótamos, elefantes, monos, leones marinos… Y la familia sigue creciendo, ya que han nacido dos bisontes lowland en el recinto natural.
Las instalaciones de Cabárceno, entre las mejor valoradas por los organismos que vigilan las condiciones de vida de los animales, ofrece más de 20 kilómetros de carreteras que las surcan y que conducen al visitante a diferentes recintos a través de preciosos desfiladeros, apacibles lagos y sugerentes figuras rocosas. Además, existen numerosas zonas de aparcamiento y sendas que permiten descubrir rincones de gran belleza. “Es un lugar ideal para pasar el día en familia, ya que dispone de zonas de recreo, merenderos, miradores, rutas botánicas, cafeterías, restaurantes y hasta un parque infantil”, explican desde el parque.
Visita salvaje
Además, existe la posibilidad de realizar una visita denominada salvaje que proporciona la posibilidad de acercarse más a los animales, siempre bajo una buena protección. Las visitas permiten la entrada de perros aunque no el acceso de las mascotas a la telecabina del parque, que ofrece una visión elevada del mismo. La limitación de velocidad para coches en el recinto es de 20 kilométros por hora.
Las entradas en verano están a la venta a 39 euros. Los niños de cuatro hasta 12 años deben abonar 21,50 euros para acceder al interior. Se pueden adquirir las entradas on line para agilizar la llegada en https://entradas.parquedecabarceno.com.