Mediaset España continúa en su camino de tratar de recuperar audiencias de tiempos pasados y más allá de programas como Supervivientes, que en la actualidad es el que mejor resiste, y su versión All Stars para este próximo verano con motivo del vigésimo aniversario del formato, Telecinco confía en apuestas como Gran Hermano y su nueva entrega con personas anónimas.
Algo a lo que habría que sumar, cara a la próxima temporada, el regreso del mítico Caiga quien caiga. Según informaciones recogidas por medios como Algo Pasa TV, ya se estaría trabajando en la nueva versión del programa y en la búsqueda de quienes se harían cargo del mismo tanto en el papel de presentadores como en el de los diferentes reporteros.
De confirmarse, el programa volvería a la pequeña pantalla casi tres décadas después de su estreno, allá por 1996, también en Telecinco. Y es que con este nuevo Caiga quien caiga se llegaría a una quinta etapa del programa. La primera, entre 1996 y 2002, presentada por el Gran Wyoming, Javier Martín y Juanjo de la Iglesia. Telecinco decidió recuperar el programa tres años después, en 2005, con Manel Fuentes, Arturo Valls, Juanra Bonet, Eduardo Aldán, Deborah Ombres y Leandro Rivera. Esta segunda etapa se mantuvo en antena hasta 2008.
Ese mismo año, pasó a laSexta con Juanra Bonet, Frank Blanco y Toni Garrido como conductores. Y la última entrega hasta el momento, de vuelta en Mediaset, la emitió Cuatro en 2010 presentada por las actrices Ana Milán, Silvia Abril y Tania Sarrias. Estas dos últimas entregas resultaron las menos exitosas en audiencia.
Ponerse las gafas negras
Todos estos nombres eran la cara visible en plató, pero quienes se batían el cobre en los reportajes y tratando de que los personajes se pusieran las gafas negras del programa eran los reporteros. Aquí la lista incluyó al propio Arturo Valls antes de ser presentador, Pablo Carbonell, Tonino, Sergio Pazos, Christian Gálvez, Antonio Castelo o el mismísimo Gonzo, hoy en laSexta.
No fue fácil que Caiga quien caiga cogiera vuelo y que los personajes a los que se acercaban todos estos reporteros accedieran a contestar a sus preguntas y menos aún a ponerse las gafas del programa. Hasta que consiguieron que quien se las pusiera fuera el hoy monarca emérito y a partir de ahí, el programa cosechó mejores audiencias e incluso el por entonces presidente del Gobierno José María Aznar se hizo muy amigo del programa. Aunque, lo que son las cosas, muchos interpretaron que las críticas desde Caiga quien caiga a su Ejecutivo fueron las que acabaron por hacer que Telecinco cediera ante presiones políticas y lo cancelara en 2002.
Pero Caiga quien caiga no era solo una sucesión de reportajes. Algunas de sus secciones fueron especialmente destacadas. Entre ellas el Curso de ética periodística de Juanjo de la Iglesia o Las peores noticias.
El programa consiguió, entre otros reconocimientos, el Premio Ondas.