El consejo de administración de CaixaBank ha aprobado la adhesión a los Códigos de Buenas Prácticas que integran las medidas de apoyo a los hipotecados con dificultades.
Tras varias semanas de negociación entre el Ministerio de Asuntos Económicos y las patronales del sector financiero, el Consejo de Ministros aprobó el martes el Real Decreto-ley para aliviar la carga hipotecaria de más de un millón de familias vulnerables o en riesgo de vulnerabilidad por la subida del Euríbor.
La norma mejora el tratamiento de las familias vulnerables, abre un nuevo marco de actuación temporal para familias en riesgo de vulnerabilidad por la subida de tipos y adopta mejoras para facilitar la amortización anticipada de los créditos y la conversión de las hipotecas a tipo fijo.
Los dos Códigos de Buenas Prácticas son de adhesión voluntaria por parte de las entidades financieras, que estarán obligadas a cumplirlos una vez suscritos.
El consejo de administración de CaixaBank ha aprobado la adhesión de la entidad a la ampliación del Código de Buenas Prácticas Vigente y al nuevo Código para las clases medias.
Se convierte así en la primera entidad en comprometerse a aplicar este paquete de medidas, con las que se busca anticiparse y aliviar las posibles situaciones de dificultad que puedan tener en el futuro algunos hogares para pagar la hipoteca de su primera vivienda como consecuencia de la subida de tipos de interés.
Desde el banco destacan que CaixaBank ha sido la entidad más activa en la concesión de ayudas acogidas al Código de Buenas Prácticas y ha llevado a cabo el 35% de las operaciones del conjunto del sector.
El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha explicado que el consejo de administración ha tomado la decisión de adherirse a las nuevas iniciativas porque son "los principales interesados" en apoyar al conjunto de la sociedad y, especialmente, a sus clientes en dificultades. "Lo hemos hecho siempre, lo hacemos en la actualidad y vamos a seguir haciéndolo en el futuro porque tenemos el compromiso y el deber de contribuir al bienestar económico y social del país", ha afirmado.
De su lado, el consejero delegado, Gonzalo Gortázar, ha subrayado que CaixaBank "se encuentra en una posición muy sólida para seguir ayudando a familias y empresas y para contribuir a que el impacto del deterioro económico que se pueda producir sea más moderado".
Asimismo, ha puesto en valor el papel fundamental que juega la banca en la economía y la sociedad. "Cumplimos una función social básica", ha asegurado.
El banco quiere demostrar, con su adhesión a los Códigos, su compromiso para estar cerca de las personas para contribuir a su bienestar financiero, especialmente en los momentos de mayor dificultad.
La entidad también ha destacado que su vocación social se refleja en tres grandes ámbitos: el de las ayudas a clientes con dificultades (mejorando las condiciones de 360.000 hipotecas desde la crisis anterior), el de la inclusión financiera (con la red de oficinas y cajeros más extensa del país y el compromiso de no abandonar poblaciones) y el de las iniciativas sociales (incluyendo el dividendo social a la Fundación "la Caixa").