El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha confirmado este miércoles que, durante su reunión con el ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos, Nasser Bourita, analizó con él la opción de llegar a algún tipo de acuerdo para confiar a Rabat la atención de menores marroquíes que en este momento están bajo la tutela de la comunidad autónoma.
En un desayuno organizado por el diario Canarias 7, Clavijo ha matizado que no se trata de trasladar a los menores a un tercer país -como ha acordado Italia con Albania con el beneplácito de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, y el rechazo del Gobierno español- sino a su país de origen, con las garantías previstas en la ley.
Se trata de una alternativa que el jefe del Gobierno canario ya está explorando con Marruecos al bloqueo actual sobre la reforma de la ley de extranjería para que las comunidades autónomas estén obligadas a compartir la responsabilidad de esa acogida.
Canarias ha emplazado de nuevo al Gobierno y al PP a reunirse para estudiar su nueva propuesta, un guante que ya ha recogido el ministro Ángel Víctor Torres, quien ha invitado a su interlocutor en la oposición, Miguel Tellado, a fijar una cita para la próxima semana.
Clavijo ha recordado que la Ley de Extranjería permite expresamente a las comunidades autónomas en su artículo 35.2 "establecer acuerdos con los países de origen dirigidos a procurar que la atención e integración social de los menores se realice en su entorno de procedencia".
"Tales acuerdos deberán asegurar debidamente la protección del interés de los menores y contemplarán mecanismos para un adecuado seguimiento por las comunidades autónomas de la situación de los mismos", añade ese artículo de la ley, en el que se regula la situación jurídica de los menores extranjeros no acompañados.
Si esa posibilidad de acuerdo prosperase con Marruecos, ha añadido, se abriría una vía para que sean las autoridades de ese país las que atiendan a menores marroquíes que han llegado a la islas en patera sin un adulto a su cargo, aunque la comunidad de Canarias conserve cierto grado de tutela o supervisión sobre ellos.
Mantener buenas relaciones con Marruecos
En este encuentro, Clavijo ha enfatizado que a Canarias le interesa mantener las mejores relaciones posibles con Marruecos como país vecino y, por ello, no ha dudado en repetir lo que ya dijo en presencia de Bourita en Rabat: el Gobierno de Canarias "asume" la nueva política de España con respecto al Sahara Occidental.
El presidente canario ha sido claro: su partido, Coalición Canaria, del que es secretario general, ha tenido una posición histórica conocida, y la mantiene a día de hoy, de apoyo a una solución para el Sahara acorde a las resoluciones de la ONU.
Pero una cosa es su papel como líder de CC y otra su responsabilidad como presidente de Canarias, ha matizado, y en el plano institucional considera que le corresponde ser leal a la política exterior que el Gobierno de España ha marcado en esta cuestión, sobre la que la comunidad autónoma no tiene competencias.
"Se ha abierto una ventana de oportunidad en las relaciones con Marruecos (...) A Canarias le interesa mantener la mejor relación posible con Marruecos", ha insistido Clavijo, antes de precisar que no por ello van a renunciar mantener buena relación con el Frente Polisario, la organización que abandera la reclamación de independencia de los territorios ocupados por Rabat en el Sahara.
Entre el auditorio, escuchando estas palabras, se encontraba Fatiha El Kamouri, cónsul de Marruecos en las islas, a la que el propio presidente se ha referido en su intervención en este desayuno informativo.
Preguntado en Madrid por la opción que explora Canarias de llegar a acuerdos con los países de origen de los menores, el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, ha dicho que la solución a este problema sigue siendo reformar la Ley de Extranjería para que la acogida por las comunidades autónomas sea obligatoria y no voluntaria.
Porque otras fórmulas, ha añadido, "como se han hecho en el pasado (de traslado de menores) a terceros países y también a países de procedencia, han dado números muy bajos de menores no acompañados".