Junio suele ser el mes de los despachos. El mes en que se deben cerrar los respectivos proyectos deportivos para la temporada venidera. Es el mes en que expiran contratos o se renuevan, se dan bajas, se emprenden fichajes y se conocen, entre otros asuntos, a los inquilinos de los respectivos banquillos. Los clubes vizcainos que ejercerán la próxima temporada en el grupo IV de Tercera RFEF, que se amplía de 16 a 18 equipos, ya ultiman sus proyectos y todos ellos, salvo el Deusto, ya tienen confirmados los nombres de quiénes serán sus entrenadores. Así es el caso de Portugalete, Cultural de Durango, Aurrera de Ondarroa, Basconia, Padura y Urduliz, mientras que también lo tiene asegurado el Leioa, que el domingo puede ascender a Segunda RFEF si es capaz de hacer valer en Maspalomas el 2-0 a favor de la ida en Sarriena en su eliminatoria ante la UD San Fernando grancanario, y habrá que esperar a conocer el conjunto que ascienda a la categoría desde la División de Honor, con el Derio como máximo candidato, para completar el puzzle.
Los primeros cuatro clubes mencionados en la lista anterior se han inclinado por unas apuestas lideradas por caras nuevas, en tanto que el Urduliz y el Padura siguen confiando en Alain Arroyo y Aitor Garmendia, respectivamente, sabedores de que han cumplido con el objetivo de sellar la permanencia, muy importante para estos dos humildes entidades. El Padura, además, ha renovado a Ander Gonzalo, su capitán y pichichi de la liga regular del grupo. El Leioa también repetirá con Urtzi Arrondo, independientemente de la categoría en que ejerza en el nuevo curso, una vez que el guipuzcoano ha respondido a las expectativas para continuar liderando el proyecto, previsiblemente en la exigente Segunda RFEF salvo desplome de su equipo en terreno canario. El Deusto. por su lado, se encuentra a la espera de la decisión que tome Aritza Escandón, el hombre que ha llevado al conjunto tomatero al play-off de ascenso por segunda temporada, en el que eliminó en primera instancia al Vitoria, el gran favorito, y donde tuteó después al Leioa. La Junta Directiva del club tomatero, que a día de hoy no tiene plan B, ha ofrecido la renovación a Escandón, aunque este ha pedido un tiempo para meditar sobre su futuro.
El Portugalete, por su lado, anunció en la tarde del miércoles la contratación de Iván Franco, un técnico joven procedente del juvenil de Honor del Eibar y que acumula una experiencia de diez años en las categorías inferiores, con lo que la entidad jarrillera da un giro radical tras el fiasco del curso pasado con Patxi Salinas, primero, e Iban Fagoaga, después, en el banquillo. El Basconia recurre a Bittor Llopis, que salta desde el juvenil de Honor para suplir a un Carlos Gurpegi que coge el Bilbao Athletic, ascensos que se dan históricamente, salvo excepciones, en la factoría rojiblanca. Mikel Etxaburu, Pixki, da por cerrada su etapa en el banquillo del Aurrera de Ondarroa, aunque no abandona la entidad costera, ya que asume la dirección deportiva del club de su pueblo y su primera decisión radica en la apuesta por Loren Barbado, que ha dirigido últimamente a la selección de Euskadi sub’16 y que llega acompañado de Alex Santiago como su segundo. La Cultural de Durango, que no cumplió el objetivo de alcanzar el play-off como también le ocurriera al Portugalete, se inclina por llevar aire fresco. Mikel González, que relevó a mitad de competición a Beñat Etxebarria, no continúa en el banquillo y le sustituirá Iñaki García, Pele, procedente del Getxo y apuesta personal de Jon Garai, Tuto, el nuevo director deportivo del club blanquiazul, que también ha dado la baja ya a diez futbolistas de la plantilla de este curso, mientras que ha anunciado la renovación de otros cuatro.