Caras y cruces, según Altuna III

"En junio hago diez años y jugar mi quinta final del Manomanista es muy grande”, dice Jokin Altuna (Amezketa, 1996) cuando se le pregunta por la cita de este domingo ante Laso en el frontón Bizkaia de Bilbao. Suma en total quince finales en Primera y es la referencia de la pelota a mano profesional.

Manomanista de 2018

“No me esperaba llegar a la final contra Aimar”

Altuna celebra la txapela del Manomanista de 2018. Pablo Viñas

Jokin Altuna pisó su primera final del Manomanista el 27 de mayo de 2018. En el retrovisor, el amezketarra llevaba ya dos experiencias similares en Primera en el Cuatro y Medio. En 2016 perdió contra Oinatz Bengoetxea por 22-21 y en 2017 clavó el mismo resultado ante Mikel Urrutikoetxea, pero esa vez la moneda cayó de su lado.

Después de ser semifinalista del mano a mano en 2016 y haber llegado a cuartos en 2015 y 2017, el guipuzcoano alcanzó la final tras derrotar a Julen Retegi (12-22), Mikel Urrutikoetxea (16-22) y Joseba Ezkurdia (17-22). “Fue todo nuevo. No me lo esperaba. No la txapela, sino llegar a la final. En todos los partidos fui la sorpresa. Los rivales eran más favoritos que yo”, recuerda Altuna III.

El título se debatió en Bilbao en un cruce generacional con Aimar Olaizola -38 años entonces y cuatro txapelas de la modalidad-. Altuna III -22 años- acertó a buscar la pared izquierda para desmontar a su contrincante, al que supo mover. Después de un comienzo apretado, Jokin se serenó para ponerse 8-14. A partir del 13-14, el de Aspe se fue 13-20. El partido acabó 14-22 en 65 minutos de juego. Se cruzaron 316 pelotazos a buena. Altuna terminó quince tantos en jugada y dos saques. Cometió dos errores.

“Cuesta creer que te puede pasar algo así. No lo esperaba tan pronto. Pensaba que tenía posibilidades de ser campeón del Manomanista, pero no tan pronto”, agrega el delantero de Amezketa.

Manomanista de 2020

“Fue un golpe duro, pero me vino bien”

Jaka levanta el cetro del Manomanista de 2020 al cielo tras una edición exprés por el covid-19. J.M. Martínez

En el mano a mano de 2019, el huracán Iker Irribarria volvió a arreciar. Se llevó por delante a Jokin en cuartos de final (18-22). El zurdo de Arama acabó ganando el título ante Urrutikoetxea en una grandísima final (20-22).

La pandemia del covid-19 saltó en mitad del Parejas de 2020, paralizando no solo el deporte, sino la vida. La pelota volvió a golpear el frontis el 24 de junio, de tal modo que la resolución del campeonato de duetos y el Manomanista quedó en stand-by hasta noviembre. “En esa edición sí que me veía muy bien. En la primera final no tenía la meta de ser campeón, pero en esta sí”, recuerda Altuna III. El amezketarra superó a Peña II (22-5), Joseba Ezkurdia (18-22) y Darío Gómez (22-15) en una edición exprés, solventada en apenas un mes.

Un sorprendente Erik Jaka se metió en la fiesta en una final que se disputó sin público. El lizartzarra se llevó el gato al agua por 22-20 con dominio en el luminoso desde el inicio. Estuvo 5-0, 9-7, 17-11 y 21-14. Jokin maquilló en los últimos compases. Se cruzaron 284 pelotazos en 59 minutos. Erik finalizó seis saques y Jokin siete. “Fue un golpe duro, pero también un aprendizaje enorme”, remacha el amezketarra.

Manomanista de 2021

“Fue agridulce porque Artola no pudo jugar”

Rezusta, Altuna III y Artola, en el podio de 2021. Borja Guerrero

Jokin Altuna se sacó la espina apenas seis meses después. La edición de 2021 también estuvo marcada por las mascarillas y la pandemia. El Bizkaia volvió a registrar una final vacía, con apenas técnicos, periodistas y pelotaris en las gradas. El de Aspe, cabeza de serie, pasó por encima de Ezkurdia (15-22) y Zabaleta (8-22) para entrar en la final. 

Por la otra rama, un enorme Iñaki Artola se había deshecho de Asier Agirre (22-18), Urrutikoetxea (7-22) y Beñat Rezusta (16-22) para anotarse su primera pelea por una txapela en Primera. Sin embargo, el alegiarra sufrió una rotura en el músculo dorsal derecho en la semifinal y pidió una semana de aplazamiento, que se le concedió, pero no llegó a tiempo. Rezusta, ganador de la final de consolación, fue el sustituto. Jokin venció por 5-22 en una final casi perfecta. Duró apenas 45 minutos y se cruzaron 209 pelotazos. Jokin finalizó once tantos y cinco saques y falló dos pelotas. “Fue la confirmación y algo muy importante para mí”, destaca el buque insignia de Aspe, quien desbroza que “también reconozco que fue agridulce, porque no pudo jugar Iñaki Artola y el frontón estaba vacío”.

Manomanista de 2023

“Acabé el campeonato perdiendo fuelle”

Elordi y Jokin. Borja Guerrero

Los problemas de manos constantes pasaron factura a Altuna III en la edición de 2022, cuando se instauró la liguilla en cuartos de final. Aun así, Jokin dio la cara hasta las semifinales, donde perdió ante Laso por 17-22. Poco tiempo después, el amezketarra pasó por el quirófano para extirpar un nódulo en su zurda.

En 2023, en cambio, el de Aspe se llevó por delante a Laso (9-22), Elordi (22-18), Elezkano II (12-22) y Ezkurdia (12-22). Elordi, por su parte, que venía rodado del Parejas y en su primera participación dio la campanada al entrar en la final. “Me veía muy bien, pero recuerdo que el campeonato fue largo. Acabé el Parejas como una moto y empecé el Manomanista igual. Había sido un año duro. Desde semifinales noté que me faltaba un poco de fuelle. En esa eliminatoria, Ezkurdia no anduvo bien y pude sacarlo adelante. Fui de más a menos”, destaca Jokin.

La final acabó 18-22 para el vizcaino. Hubo 2.774 espectadores en las gradas del Bizkaia que contemplaron un choque de 65 minutos y 253 pelotazos. Jokin fue por delante hasta el 12-8, pero el mallabitarra metió ritmo con su diestra y aplicó remate para ponerse 14-18 y 16-20. “Elordi llegó muy bien. Fíjese, desde el segundo partido de cuartos contra Aitor, con el que me clasifiqué, hasta la final pasó mes y medio”, sentencia.