El descenso de varias de las modalidades de caza menor con perro ocasionadas por la degradación de la estepa cerealista, como es el caso de la perdiz y codorniz, ha trasladado el interés de los cazadores navarros hacia la caza de la becada ya que tiene todos los ingredientes para haberse convertido en una de las especies preferidas de un gran número de cazadores navarros que ven en esta enigmática ave el objeto de su pasión cinegética.
¿Cuáles son las razones de su éxito? Para Adecana las razones de su éxito es que se trata de una especie migratoria con poblaciones relativamente abundantes y que según los estudios se mantienen estables, que cría en los países del norte de Europa, y que cuando acaba el otoño y comienza el invierno emigra hacia el sur para pasar el invierno, quedándose en Navarra parte de sus poblaciones en sus zonas de invernada. No debemos de olvidar que algunas de ellas incluso viven y crían en las zonas más húmedas del norte de nuestra Comunidad foral, por lo que debemos de tratar sus poblaciones como si fuera una especie autóctona, aunque la mayor parte de sus efectivos son migratorios.
Por supuesto, como el resto de especies, la becada necesita un hábitat natural no alterado y bien conservado, y esto es algo que, a diferencia de las zonas agrícolas donde han menos biodiversidad, en Navarra lo encuentran ya que abundan las zonas boscosas y de maleza donde se cobijan y encuentran las praderas donde puedan alimentarse. Este tipo de habitar lo encuentran tanto en el norte en la Navarra húmeda donde abundan los hayedos y abetales, como en los bosques de robles y otras especies arbóreas y bojerales de la zona prepirenaica y el centro de Navarra, así como en las espesuras y riberas de los ríos en el sur.
Es un tipo de caza que tiene tanta aceptación ya que se practica en un hábitat natural de gran belleza y dura de practicar, y sostenible, ya que está limitada por un cupo diario de tres ejemplares por día. Para su práctica el cazador necesariamente tiene que estar en forma ya que hay que andar bastante si se quiere conseguir algo positivo, y en la que la ayuda del perro especialista y que haga buenas muestras en buscarlas es fundamental para el éxito de sus capturas. El binomio cazador perro-cazador se complementa mutuamente, estableciéndose una relacion muy especial entre el cazador y su perro. Generalmente se utilizan ejemplares de setter, pero también se utilizan pointer, pachones, Spaniels, etc.
Acaba el periodo de pasa y comienza el de invernada Por el contrario de temporadas anteriores en las que los cazadores navarros pudieron disfrutar de una gran cantidad de becadas que visitaron nuestra comunidad, esta está siendo, como está ocurriendo en el resto de Europa muy irregular por la sequía y la bonanza del tiempo, y tal como nos informan desde el Club de Cazadores de Becada se trata de una de las peores temporadas de becada en cuanto a densidad de la dama del bosque. Y eso que otras migratorias no han faltado, si bien en noviembre se han detectado algunas raves no habituales que han llegado como consecuencia de los fríos y temporales en zonas norteñas. Sin embargo con el mes de diciembre volvió la tónica habitual de los últimos meses con la dorsal cálida en el sur de Europa y el anticiclón bloqueando cualquier inestabilidad y encima canalizando el viento sur hacia el continente, lo que ha hecho dispararse las temperaturas. En navidad se han vuelto a batir registros de calor en muchas regiones europeas, con anomalías de +15 C.
Miguel Minondo delegado en Navarra del CCB afirma que “solemos considerar el 15 de diciembre como la fecha en la que termina la migración estricta de otoño, y que si bien a partir de ahora se pueden producir erratismos o movimientos provocados por olas de frío, pero básicamente podemos considerar que todo el pescado está vendido y que las becadas que hay ahora en los montes navarros ya llevan días instaladas en sus cuarteles de invernada.”
¿Qué está pasando este año con las becadas? Esta es la pregunta que más se está haciendo los aficionados a esta limícola, y para ello desde Adecana nos hacemos eco de lo que opinan en la web de la casa de la becada que administran desde el CCB.
Si bien octubre ha sido un espectáculo con migraciones record de zorzales, palomas y multitud de pajarillos, entre los aficionados y ornitólogos consideran que esta primera parte de la campaña como el peor en muchos años, por no decir de la historia. Con los datos en la mano durante las sesiones de anillamiento en La Casa de la Becada han encontrado exactamente la mitad de las becadas que el año pasado. En su opinión las causas han sido las siguientes:
-La sequía. Desde mayo llevamos en Navarra una situación completamente anómala, traducida en un total de precipitaciones de 94 mm, un 49% por debajo de lo habitual, y una temperatura casi 3ºCpor encima de lo normal.
-Calor en Europa. El mes de octubre y arranque de noviembre han sido extraordinariamente cálidos en los territorios de cría de la becada, y las primeras heladas no se produjeron hasta el 18 de noviembre, casi con un mes de retraso a años anteriores.
-Vientos contrarios a la migración. Las borrascas estancadas frente a Galicia unidas a un potente anticiclón en el mediterráneo han enviado un flujo continuo de viento sur, cálido y seco hacia nuestras latitudes. Estos aires de pico frenan o desvían la migración de las becadas. En octubre y noviembre apenas hemos contado con jornadas de viento noroeste, favorable a la migración hacia nuestra zona.
Sin embargo, el año de cría en el norte de Europa y atendiendo a la información que nos llega desde el Club National de Becassiers ha sido normal, por lo que era esperable que un buen número de ejemplares jóvenes estén por llegar, pero para Adecana, dadas las fechas que nos encontramos parece que se van a hacer de rogar y este año nos tendremos que conformar con lo que hay.