Una treintena de menores y jóvenes con discapacidad intelectual y grandes necesidades de apoyos pasarán por el albergue de Barria para disfrutar de una semana de actividades adaptadas, divididos en dos grupos.
El primero ya está allí, y entre el 8 y el 14 de este mes irá el segundo (de edades comprendidas entre los 7 y los 18 años, y los 19 y los 30 respectivamente). Los quince chicos y chicas de entre 7 y 18 años que esta semana ya están allí (la más pequeña realmente tiene 11), han disfrutado además este martes una bajada de Celedón que ha dado inicio a una mañana de actividades, deporte rural y baile incluidos. Todo forma parte de un programa de ocio y de estancia que está organizado por la Diputación Foral de Álava.
Al toque de cuerno, alrededor del mediodía, estos jóvenes y sus diecisete monitores han podido ver el descenso de Celedón, bautizado bajo el nombre de Talurtxo (Talur es el nombre de la asociación que se encarga del programa, una asociación sin ánimo de lucro cuyos fines principales son potenciar el desarrollo, el empoderamiento y la autonomía de las personas con discapacidad intelectual, así como su integración social).
Visitantes
Todo esto, además, bajo la atenta mirada del diputado de Políticas Sociales, Emilio Sola; el director de Innovación, Sistemas de Gestión y Evaluación del departamento de Políticas Sociales, Iñaki Artza; y la directora de Deporte y Juventud, Ana Rosa López de Uralde, entre otros, que no han dejado pasar la oportunidad de sumarse a la diversión dando palmas al ritmo de la música que sonaba desde los altavoces al son del himno de Celedón.
Sola ha tenido incluso el honor de leer el pregón anunciador de las fiestas, "toda una sorpresa, pero muy agradable".
Redactado por los protagonistas de la jornada, ha señalado, entre otras cuestiones, que "este año ha sido duro para todos, especialmente para las personas con discapacidad que se han visto afectadas de primera mano por las circunstancias actuales. Por ello, queremos celebrar estas fiestas en honor a todos los alaveses de este colectivo. Hoy disfrutaremos juntos para demostrar que tenemos los mismos derechos que toda la ciudadanía".
La presidenta de Talur, Amaia González Ruiz de Apodaka ha recordado además que este es el quinto año que se celebran estos udalekus, ni siquiera la pandemia ha conseguido frenarlos, y que todos los jóvenes se han hecho PCR y test de antígenos antes de acudir, todos ellos con un resultado negativo. En estos udalekus, al fin y al cabo, ofrecen actividades adaptadas a las necesidades de los participantes con el objetivo de romper moldes, en un programa que busca el respiro de todos.
Diferentes actividades
En su día a día a lo largo de esta semana juegan al rugby, practican muay thai, e incluso hacen terapia canina de una manera alternativa: "Aprenden a darles órdenes, y a los que van en silla de ruedas los tumbamos en el suelo", añade González Ruiz de Apodaka.
Para este miércoles, la fiesta no ha terminado. Tras el txupinazo ha venido el baile, y después deporte rural con captura de ganado y arrastre de bueyes incluido, en el que los monitores han hecho de animales. Y por la noche ya adelantan que habrá conciertos.
El diputado foral se ha mostrado "muy contento" con esta visita. "La sensación es sumamente positiva, porque es un programa de ocio y tiempo libre de un diseño especial, adaptado a estos chicos y chicas con diversidad funcional y con objetivo múltiple: se fomentan las relaciones interpersonales, fomentamos su autonomía personal en la medida de lo posible y que vayan adquiriendo una serie de habilidades y capacidades".