“Esta película va de no hacer cosas. Sara es una persona que no hace nada durante demasiado tiempo y eso explota”. Con esta ambientación, el espectador se adentra en una historia que es la prolongación de un corto de Carlota Pereda, Cerdita, que con el bagaje de haber cosechado más de 80 premios decidió, con la ayuda de la productora Morena Films, debutar con un largometraje que se adentraba en el mundo de Sara (Laura Galán) una adolescente acosada, humillada y vejada por el bullying, y atada al calificativo de “cerdita”, que se ve envuelta en una historia donde salen a la luz los miedos y que pondrá a prueba muchas cosas. Como explicó ayer María Soler, de la productora Morena Films, en la presentación de la película en el Festival Ópera Prima de Tudela, “Carlota quería hacer una película sobre el miedo y para cada persona el miedo es diferente. Eso le hizo escribir esta historia”.
La historia tiene su origen en un pueblo de Extremadura, un lugar donde Carlota, que de joven también sufrió cierto acoso escolar, acudió a la piscina al mediodía y vio a una joven en ese mismo lugar en unas horas, cuando el sol caía de pleno, en las que debía estar allí por evitar a la gente. A partir de ahí nació la historia del corto Cerdita que en cuanto lo vieron en la productora decidieron apostar por Carlota Pereda. “Nos gusta apostar por películas que importan, que dejen un mensaje o sean una revolución en la forma de pensar o en la forma de ver cine. Eso es lo que nos atrae para hacerla. Vimos el cortometraje, vimos un talento abismal y hablamos con ella y le dijimos ‘puedes hace lo que quieras’. El corto era un spoiler de que la película tenía talento y podía funcionar muy bien. Había miedo a adaptar bien el corto, máxime cuando era tan conocido y premiado. Puedes equivocarte, acertar o quedarte en la nada. Lo ha hecho bien y ha funcionado bien en taquilla”.
El paisaje rural, el calor y un calor asfixiante es el mejor escenario para una historia de genero que clava sus raíces en películas de culto como La matanza de Texas, y cuya directora bebe claramente de las fuentes de directores emblemáticos como Hitchcock o Shyamalar. Paisajes desérticos, claustrofóbicos donde ni la protagonista, Sara (Laura Galán), ni el espectador puede encontrar refugio o descanso. Todo supura tensión, recelo y hasta odio y para ello nada mejor que un paisaje del mundo rural ya que, como señaló la productora, “todo lo rural se parece en todo el mundo”, con lo que gana universalidad y comprensión aunque la historia sea genuinamente española.
En este sentido Soler afirmó que “parte de lo que quería transmitir Carlota es que si estas en un pueblo no puedes huir. Las mismas personas que te hacen bullying en el colegio, van a comprar a la tienda de tus padres o son tus vecinos. El entorno te oprime aún más y por eso Sara está a punto de explotar en muchos casos. En las ciudades puedes huir a más sitios, en los pueblos no puedes escapar y es lo que quería, más allá de que el entorno rural que la hace reconocible en todo el mundo”.
Pese a lo que pueda parecer, la historia no coloca a buenos a un lado y a los malos a otro. “No hay blanco y negro. El desconocido no es el villano. Villanos son todos. Él es malo porque mata gente, pero ellas tampoco son mucho mejores”.
A la propia Carlota, el corto le atrapó hasta el extremo que necesitaba saber qué le pasada a Sara cuya experiencia en el corto “había quedado en el punto álgido, en el climax de lo que sería un largometraje”. Por este motivo, en cuanto le ofrecieron hacer un largometraje con Cerdita se puso a escribir y “en tres días vomitó toda la historia. Luego hubo que perfilar un poco y arreglar, pero lo importante lo hizo en tres días”, explicó ayer Soler.
El hecho de que haya sido etiquetada como cine “de género” (y con es etiqueta ya ha conseguido varios premios internacionales) no supone un impedimento en taquilla, “la película tiene mucho que sorprender tanto a los que esperan algo de género como a los que no saben del género. Puede gustar o decepcionar, pero esta gustando más que decepcionando”.
EN CORTO
- Carmen Machi. “En función de Laura Galán, que era fija había que construir el resto de la película. Carmen Machi era seguro la madre, porque te puede dar el drama, la comedia, la tensión, el terror... es la Meryl Streep española. Ella iba a marcar el tono. En fucnión de ellas las demás”.
- Laura Galán. Para la película decidieron no repetir el elenco del cortometraje porque entre uno y otro habían pasado 4 años. Solo Laura Galán repitió porque “es una persona muy inteligente y fuerte. En el corto tenía 28 y en la peli 32, pero estudio y trabajó cómo expresarse con su cuerpo porque no tiene casi diálogo. Así que habla, anda, respira y se viste como una adolescente. A Laura el teatro le ha traído hasta aquí. Ha trabajado mucho como regidora y era su primer protagonista. Incluso llegó a trabajar atándole las botas a Carmen Machi”, explicó Soler.
- 30 kilos. El actor que hace de “desconocido” es Richard Holmes, que aunque se presentó para interpretar el papel de un guardia civil, Carlota le eligió para hacer de villano. La realizadora le pidió que engordara 30 kilos para la pelicula y lo hizo en un mes.
- Sin Juan Diego Botto. Hoy se proyectará la película ‘En los márgenes’ si bien no podrá venir Juan Diego Botto como se había anunciado, enfermo de covid.