Sin ropa de nieve y zapatillas de deporte para subir al Moncayo a pesar de la alerta meteorológica

Nieve, placas de hielo y niebla a la caída de la tarde jugó una mala pasada a un grupo de diez jóvenes navarros, de entre 16 y 22 años y procedentes de la localidad de Murchante, que se extraviaron mientras intentaban ascender a la cumbre.

El incidente se saldó con uno de ellos herido leve, con rasguños en un brazo, y esperemos que hayan aprendido la lección porque había alerta meteorológica en la zona que no aconsejaban precisamente subir al Moncayo. Concretamente eran dos las alertas, una por nieve y otra por fuertes alertas.

El suceso obligó a desplegar un amplio operativo que movilizó a efectivos de las provincias de Zaragoza y Soria, con hasta ocho patrullas de la Guardia Civil y bomberos de la Diputación de Zaragoza (DPZ) y de Ágreda. El rescate se prolongó a pie unas siete horas, hasta las once de la noche, y se desarrolló en unas difíciles condiciones por las condiciones climáticas. 

En primer lugar, se buscó a tres personas, dos de ellas presuntamente heridas por una caída. Posteriormente se amplió la búsqueda a un segundo grupo formado por siete amigos de los que ya había llegado a la cima y que se habían desorientado. De hecho, no estaban juntos sino en tres sitios diferentes.

Los especialistas usaron cuerda para asegurar a las víctimas ya que no tenían medios ni material necesario. Otros tres de los jóvenes bajaron por su propio pie.

Los expertos siempre advierten de que el Moncayo es una montaña engañosa. Sobre todo en invierno en la cumbre se registran temperaturas muy bajas. La situación se complica todavía más cuando aparece el hielo y la niebla.