Donostia – El primer autobús completo de la asociación vasca Chernobil Elkartea, de familias que acogen a menores ucranianos en verano, llegó la madrugada de ayer desde Polonia con 56 personas a bordo, de las cuales 41 son menores que viajan con sus familias.
El vehículo fletado por la asociación vasca que desde hace más de 25 años acoge durante las vacaciones a niños y adolescentes nacidos en el entorno de la ciudad ucraniana de Chernóbil partió el jueves de Katowice (Polonia) y llegó a la capital vizcaina pasada la medianoche.
Los niños y sus acompañantes adultos llegaron "cansados, pero contentos e ilusionados", explicaron fuentes de la asociación que apuntaron que "no todos los niños que acogemos en verano han querido venir".
Aseguraron que "la salida de la tropas rusas de las aldeas cercanas a Chernóbil y el restablecimiento de parte de las comunicaciones han hecho posible este hito" que la agrupación vasca llevaba semanas esperando. Los que sí han viajado en el autobús han sido 15 niños que han pasado los últimos veranos con familias vascas y navarras, los cuales han llegado junto a varios miembros de sus familias de Ucrania, la mayoría hermanos también menores de edad, madres y abuelas.
La gran mayoría de los refugiados serán acogidos por las familias con las que ya han convivido años atrás aunque en caso de que no tengan espacio en sus viviendas la asociación ya tiene prevista una solución. "En caso de que no tengan espacio físico, por ejemplo, a cinco miembros de una misma familia, se les derivaría a un recurso público. Eso sí, siempre manteniendo el contacto con la familia que conoce y quiere y el apoyo de la asociación", indicó una portavoz de Chernobil Elkartea.
Esta agrupación lleva desde el inicio de la guerra tratando de rescatar a los pequeños y la puesta en marcha del operativo solo ha sido posible gracias a la ayuda de Galdakaoko Boluntarioen Gizarte Elkartea, que cuenta con gran experiencia en la atención de personas refugiadas en la frontera. Cuatro personas voluntarias miembros la asociación Chernobil Elkartea viajaron recientemente a Katowice para sumarse a su equipo con el objetivo de guiar a los menores para que pudieran alcanzar la frontera de forma segura, atenderles a su llegada y organizar los autobuses con destino a Euskadi. En los próximos días, más convoyes con menores que ya han estado previamente con familias pertenecientes a la asociación abandonarán la zona de conflicto.
La asociación asegura que la "incertidumbre que sigue provocando la invasión rusa y el enfrentamiento armado en Ucrania" les "obliga a trabajar para ayudar a que las familias que así lo deseen puedan abandonar el país y permanecer en un lugar seguro".