"En dos días las familias van a tener hambre. Alguna ya lo tendrá ahora". Marian Izagirre, presidenta de Chernobil Elkartea, se hace eco de la dramática situación que viven los niños y niñas de Ucrania a los que acogen y a los que de momento no pueden ayudar dado el conflicto bélico que se vive en su país. "Si hubiese un corredor humanitario, traeríamos a los menores ya, pero no lo hay y si les sacáramos ahora mismo, les pondríamos en riesgo nosotros", explica.
Pese a sus deseos de acoger a los menores en Euskadi, la asociación no contempla actualmente esa posibilidad. "No nos entra en la cabeza porque están a 80 kilómetros de Kiev. Tendrían que llegar primero allí, según está la situación, y luego, a la frontera con Polonia. Eso se puede hacer, sin corredor humanitario, si vives justo al lado de la frontera, pero si no, no y nosotros tenemos a los niños en la zona de Chernobil", detalla. "En guerra y, con un corredor, tenemos la decisión de traerles ya tomada, pero con seguridad", recalca.
Para urgir la apertura de un corredor humanitario, Chernobil Elkartea está tocando las puertas de distintas instituciones. "Esta tarde tenemos reunión con el Gobierno vasco. Nos hemos juntado con Diputaciones, con ayuntamientos, con todo el mundo que puede influir en esa decisión, que al final es una decisión política a nivel de la Unión Europea y Putin. Nosotros desde abajo vamos empujando porque el corredor humanitario es prioritario", reclama.
En sótanos y sin poder ir a comprar
A la espera de que se dé respuesta a esta imperiosa necesidad, recaudan fondos para ofrecerles ayuda en cuanto las condiciones lo permitan. "Las familias dentro de dos días van a tener hambre porque se les van a acabar todas las reservas que tenían para el invierno y no pueden ir a comprar, ni a trabajar. Están metidos en sótanos", advierte.
Dado que "no hay ni un rato de tregua pactada", ni siquiera pueden hacerles llegar alimentos. "Hemos comenzado a recaudar fondos, pero ahora mismo tampoco se los podemos mandar. No hay seguridad para comprar comida y llevársela o que la recojan en la tienda. Tampoco hay garantía de mandar el dinero al banco porque no funcionan con normalidad", expone Izagirre.
Por ello, pese a contar con infraestructura y voluntariado para asistir a las familias, se mantienen a la expectativa. "Tenemos articulada la logística, pero en condiciones de paz o de tregua. Si hubiese un corredor humanitario, podríamos hacer una recogida y mandarlo con cualquier empresa de transporte, pero de momento no lo estamos haciendo porque no sabemos cuándo va a llegar ese momento", reitera.
"Lo único, donar dinero"
Tal y como les ha corroborado "una diputada que está moviendo el tema del corredor humanitario, lo único que se puede hacer ahora mismo es donar dinero". La cuenta habilitada por Chernobil Elkartea para recaudar las donaciones es ES62 2100 6491 1222 0003 6970. "La cantidad que se recaude se destinará íntegramente a las familias de la región de Chernobil porque no tenemos trabajadores aquí ni en Ucrania, ni comisiones que pagar", aclara Izagirre.
El último verano viajaron a Euskadi 190 menores y actualmente hay más de 300 familias vascas que se mantienen en contacto con la asociación. "Muchas familias que habían dejado de traer al niño o niña porque ya es mayor de edad o por cualquier otro motivo ahora, a raíz de la guerra, se han puesto en contacto con nosotros para colaborar", apunta la presidenta de Chernobil Elkartea.