Cuando la Black Week avanza con paso firme hacia el punto álgido que es el Black Friday para caer en ese canto de cisne de las compras online que es el Ciber Monday, cada vez son más los ciudadanos que se sientan frente a un ordenador, un móvil o una tablet para buscar la mejor oferta y el mejor precio de esa compra navideño que quieren adelantar.
Según calcula la empresa de comparativas sobre servicios de mensajería Packlink, un 67% de españoles comprará algo por internet durante esta campaña. Por su parte el Estudio de consumo de compras por internet elaborado por la empresa Miraki, se prevé que en este año 2021 suban las compras navideñas por internet un 46%, porcentaje similar al del año 2020 y 15 puntos por encima del de 2019, que fue del 31%.
Así, durante esta semana, incluso durante los meses enteros de noviembre con la fiebre del Black Friday y diciembre con las compras navideñas, miles, millones de compradores ñus recorren esa sabana africana de Masái Mara virtual que es internet en busca de pastos-chollo sobre los que lanzarse. Mientras, vigilando su actividad planean y acechan los depredadores ciberlincuentes a la búsqueda de víctimas que se pongan a su alcance para lanzarse sobre sus datos, claves, contraseñas y cuentas con las que alimentarse.
Durante la campaña de 2020 la empresa Check Point Software detectó que en todo el mundo la actividad del email phising creció durante el Black Friday un 440%. Este phising es el intento de robo por correo electrónico de datos personales como contraseñas, números de tarjetas de crédito o información bancaria a través de páginas web que fingen ser legítimas.
Es por esto que conviene ser muy precavido a la hora de hacer compras en el entorno digital. Para ello, además de las habituales precauciones de comprar en sitios seguros y conocidos, emplear plataformas de confianza y desconfiar de esos descuentos "demasiado buenos para ser verdad", Diego Barrientos, experto en seguridad informática y profesor de Udemy Business, ofrece cinco claves para evitar estos ataques siempre que se quiera comprar algo por la red.
1. Usar la autentificación en dos pasos
Además de emplear las claves habituales de acceso como son el nombre de usuario y la contaseña, es muy aconsejable solicitar una segunda verificación, que puede ser vía SMS o contestar una pregunta secreta.
2. Utilizar muchas contraseñas
Casi de primeros de redes sociales y datos de acceso. No se debe usar la misma contraseña para todo. Diferentes servicios como correo electrónico, bancos o plataformas de pago deben tener diferentes claves. Si no es así, un hacker habilidoso que logre colarse en una podrá copiarlo y usarla en los otros entornos.
3. No engancharse a un wifi de acceso público
Conectarse a una red wifi abierta facilita la labor de los malos a la hora de robar los datos personales de los más incautos. Ante esto es mejor utilizar los datos móviles del teléfono, que son más difíciles de hackear que una red wifi vulnerable.
4. Desconfiar de archivos y correos electrónicos desconocidos
Como decían los padres a los hijos cuando se quedaban solos en casa, "no abráis a desconocidos". El 'malware' ('software' con malas intenciones) y el 'phising' (suplantación de identidad digital) son las técnicas más usadas para colarse en nuestros ordenadores.
5. No conectar ningún dispositivo que no sepamos de dónde sale
Pueden estar infectados con todo tipo de virus informáticos que den acceso directo al ordenador y a su contenido