Cinco lobitos, ópera prima de la vizcaína Alauda Ruiz de Azúa; Alcarrás, segundo largometraje de Carla Simón, ganadora del Oso de Oro de la Berlinale de este año, y As bestas, de Rodrigo Sorogoyen, comenzaron ayer la carrera para llegar a representar a España en la 95 edición de los Oscar. Sólo una de estas tres películas será designada para iniciar el recorrido hacia el Oscar a la mejor película internacional de 2023, cuyo nombre se dará a conocer el próximo 13 de septiembre.
La terna, elegida por los académicos españoles entre los 42 largometrajes estrenados entre el 1 de enero y el 30 de noviembre de 2022, como recordó el presidente de la Academia, Fernando Méndez Leite, ha sido “una elección difícil” ante el elevado número de películas que “podrían habernos representado con dignidad”, en un año sobrado en cintas de alta calidad, dijo.
Alauda Ruíz de Azúa celebró en la Academia el “bonito regalo” que le han hecho los académicos: “Es un broche muy bonito para una película que se contextualiza en un mundo muy local, y que también ha viajado mucho desde su primera vez en la Berlinale”. Una cinta, dijo la vizcaína, que ha conectado “muy bien” con crítica y público: “Todos tenemos contradicciones y paradojas familiares”, señaló la directora, “muy halagada” de compartir terna con Simón y Sorogoyen.
Para su productora, Sara Hermida, Cinco lobitos es una película “hecha desde el corazón” que engancha de modo “excepcional con el espectador. Es impresionante –dijo– cómo conecta con culturas y lenguas”.
Fue la actriz María Pedraza quien puso voz a los nombres de una terna que traía “cantada” de antemano la presencia de Carla Simón, ganadora del Oso de Oro de la Berlinale con Alcarrás, distribuida ya en salas de medio centenar de países con gran aceptación del público y estrenada también en las principales plataformas. Según explicó la directora catalana, “con los premios nunca puedes dar por hecho nada”. “Estaba nerviosa –reconoció–, con todo lo que ha pasado con Alcarrás, su estreno en tantos países y el premio en Berlín, la ilusión es increíble, y es un honor estar en esta terna”, donde las otras dos cintas son, en su opinión, “propuestas increíbles y con mucha autoría”.
Simón, considera, igual que sus productores, María Zamora y Stephan Schmitz, que esta segunda vez hacia los Oscar –su primera película, Verano 1993 fue seleccionada en 2018, aunque no pasó el primer corte– será más fácil.
El productor de As bestas, Eduardo Villanueva, que no había podido contactar con Sorogoyen aunque le había enviado “montones de mensajes”, explicó que la película, que se estrenará el 11 de noviembre tras su paso por Venecia, lleva “muchos años” siendo una cinta muy especial para el madrileño. “Está escrita desde hace mucho tiempo, era una película que merecía hacerse en un momento posterior de su carrera, (él) sentía que era una película para hacer más tarde”. “Estoy muy contento especialmente porque este año era muy potente el cine español. Estar ahí es un lujo, un honor”, remató Villanueva, para concluir que las elegidas son “tres peliculones”.