HOY son una realidad pujante pero el mañana les pertenece, se les hace grande en las manos. La escritora Ana Merino y el novillero Víctor Hernández desfilaron ayer por rincones con historia de Bilbao; en la Biblioteca de Bidebarrieta ella; en los salones del Club Cocherito él. Ambos aspiran justo a eso, a dejar su huella en la historia. El tiempo dictará sentencia: o les da aire o los sepulta. Es la ley: o primera página o crónica de sucesos.
Hagamos un recorrido cronológico. El espacio Bidebarrieta Kulturgunea alzó el telón, una vez más, de su ciclo Escritoras del S. XXI. Lo hizo con la periodista Idoia Jauregi como conductora de una charla con Ana Merino, la elegida para el encuentro. Escritoras del S. XXI se puso en marcha en 2018 con el objetivo de poner el foco en la obra de autoras de la literatura contemporánea. Han participado en estos encuentros autoras como Almudena Grandes, Dolores Redondo, María Oruña, Elvira Lindo, Najat El Hachmi o Karmele Jaio. Ana Merino tampoco es una cualquiera. No en vano es catedrática y fundadora del MFA de Escritura Creativa en Español de la Universidad de Iowa. Ha publicado nueve poemarios, entre los que destaca Preparativos para un viaje, galardonado con el Premio Adonáis de Poesía en 1994, y es autora de obras de teatro estrenadas en Zúrich y Iowa. Experta en estudios culturales, es pionera, con sus ensayos, en el desarrollo de la formación académica del cómic. Ha sido columnista, miembro del Comité Ejecutivo del International Cómic Arts Forum (ICAF), del Directivo del Center for Cartoon Studies (CCS) y del Iowa City Unesco City of Literature. En la actualidad es miembro de la Junta Directiva del Teatro Riverside de Iowa. Fue galardonada con el Premio Nadal 2020 por su primera novela, El mapa de los afectos. Acaba de publicar Amigo, su segunda novela de ficción.
Ayer la trajo bajo el brazo. Antes de hablar sobre él firmó en el libro de recepciones de la Biblioteca de Bidebarrieta con una caricatura coloreada. Fue un espectáculo verla trabajar. Luego habló de una historia que indaga en la fuerza de la amistad y su reverso más doloroso: la traición. Inés Sánchez Cruz, una poeta mexicana afincada como profesora de escritura creativa en Estados Unidos, llega a la Residencia de Estudiantes de Madrid para impartir un taller de poesía e investigar un hallazgo reciente: el archivo familiar de Joaquín Amigo, uno de los amigos de Federico García Lorca, también asesinado violentamente y desaparecido al comienzo de la guerra civil. El libro alterna ficción, como ven, con realidad, habida cuenta que Ana contactó con un nieta de Amigo que le dio acceso a fotografías y cartas intercambiadas entre Joaquín y Federico. Testigos de todo lo que se contó fueron Irene Gallardo, Marisa Argüeso, Iñaki Linaza, Cristina Cortés, Koldo Azpitarte, Encarni Bermúdez, Joseba Arriaga, María Jesús González, Carmen Olabarria, Miren Zarate y un puñadito de gente más.
Todo estuvo hilado, habida cuenta que Federico fue fusilado junto a dos banderilleros. Lo digo porque unos minutos después abrió sus puertas la sede del Club Cocherito con Víctor Hernández apodándose Esperanza. No en vano, es el novillero es el primer nombre del año. Es el gran triunfador del inicio de temporada en Madrid, dueño de la primera Puerta Grande de la temporada en la Monumental de Las Ventas. Lo presentó Iñigo Crespo en compañía del presidente del Club Cocherito, Sabino Gutiérrez, y de su gesta recibieron noticia Beatriz Pobre, José Antonio Gil, Pedro Hernández, Txema Rodríguez, Joseba Laconcha, Juanjo Romano, Txomin Fernández Ángel Santamaría, Jesús Martín, Abraham Álvarez, el fotógrafo Manu de Alba,Santiago Robledo, Hellen Dulau, Esperanza Pardo y un buen número de gente que acudió a una tarde de emociones.
Bidebarrieta Kulturgunea acoge una nueva cita de su ciclo 'Escritoras del S. XXI' con Ana Merino, presentada por Idoia Jauregi
El Club Cocherito acogió al primer nombre del año entre los novilleros, Víctor Hernández, en un coloquio dirigido por Iñigo Crespo