La nueva Ejecutiva de Cs ha decidido mantener a Edmundo Bal como portavoz adjunto del Congreso y seguir por ahora con la estructura actual, pero tendrá menos cancha que hasta ahora porque Inés Arrimadas asumirá un mayor protagonismo y el diputado Guillermo Díaz será el enlace con la dirección.
La estructura se mantiene "de momento", ha aclarado el secretario general de Ciudadanos, Adrián Vázquez, en una rueda de prensa en la sede del partido, aunque los retoques que introducen sí suponen una serie de cambios efectivos. Para empezar, Arrimadas, al dejar la Presidencia del partido, será quien salga los martes en rueda de prensa en la Cámara tras la reunión de la Junta de Portavoces, un papel que tenía hasta entonces el portavoz adjunto.
Los de Bal, perdedores de las primarias aunque casi con un 40 por ciento del apoyo de la militancia, acatan estos cambios, pero aseguran que hay cierto malestar con Arrimadas dentro del grupo del Congreso, según han dicho a EFE fuentes parlamentarias, que han mostrado cierta sorpresa por el nombramiento de un "enlace" con la dirección.
Esperan, en este sentido, que hagan lo propio con el Ayuntamiento de Madrid cuando quieran "romper placas a martillazos o tirar chabolas", han subrayado con ironía al referirse a determinados posicionamientos de la vicealcaldesa, Begoña Villacís.
Otras fuentes próximas a Arrimadas han subrayado que la decisión que se ha tomado sobre el grupo es con la que "más cómoda" se sentía la exlíder naranja y la propia dirección con el fin de frenar el desgaste que ha supuesto el choque entre Arrimadas y Bal.
Los retoques suponen también un premio a Guillermo Díaz, viceportavoz en la nueva dirección y único respaldo de Arrimadas dentro del grupo parlamentario en la pelea con Bal, que asume este papel de enlace entre el grupo naranja y la Ejecutiva que lideran Patricia Guasp y Vázquez, un puesto de nueva creación que ven necesario en esta etapa.
Otra novedad que afecta al grupo parlamentario es que Adrián Vázquez y el vicesecretario general, Mariano Fuentes, asistirán a partir de ahora a las reuniones del grupo parlamentario de los jueves, otro paso que pone de relieve el control que la dirección quiere ejercer sobre los diputados al ser el Congreso el único escenario de visibilidad que prácticamente le queda a los naranjas.
Por otro lado, Cs se pone en marcha de cara a las elecciones municipales y autonómicas de mayo con una ruta que arranca este viernes en Sevilla por todas las comunidades autónomas para explicar sus propuestas de reforma y sacar a la calle esas iniciativas "que el bipartidismo está ocultando", ha dicho Vázquez refiriéndose, por ejemplo, a las pensiones.
También en esta segunda reunión de la nueva Ejecutiva se ha aprobado el calendario de primarias en las doce comunidades que celebran elecciones y en los principales municipios, con las listas ya completas antes del 28 de febrero.