El verano ya está aquí y con él llegan las vacaciones principales del año para una buena parte de la población. Hay quien se queda en su lugar de residencia, otros se marchan con el coche a destinos cercanos y los hay también que eligen lugares más lejanos, a los que viajan en avión, tren o barco. Estos últimos, al llegar a su destino, si no quieren pasar todos los días en el mismo lugar, se plantean en muchas ocasiones el alquiler de un coche que les dé independencia y no les obligue a depender del transporte público, que no siempre ofrece los recorridos u horarios que al turista le interesan.
Pues bien, antes de alquilar un vehículo para disfrutarlo unos días en vacaciones conviene tener en cuenta una serie de cuestiones para que la experiencia resulte más satisfactoria y para minimizar los riesgos y los sustos, como afirma la Federación Nacional Empresarial de Alquiler de Vehículos con y sin Conductor (Feneval).
Previsión
Prever con tiempo la necesidad de un coche puede llevar a encontrar más opciones. Además hay que conocer las fechas exactas y el lugar en el que se quiere recoger y devolver el vehículo, según nos convenga de cara a nuestro alojamiento y a la ruta que vayamos a realizar.
Busque, compare...
Como decía aquel eslogan, conviene rastrear entre las diferentes compañías y no quedarnos con la primera opción que encontremos. A veces hay diferencias muy grandes de precio y de condiciones entre unas y otras.
Se puede recurrir a un comparador para buscar nuestra mejor opción.
¿Qué modelo necesitamos?
Debemos tener en cuenta aspectos clave como el destino final, el número de viajeros, la duración del viaje o las rutas previstas para seleccionar el vehículo que más se ajuste a lo que buscamos, sabiendo que en el sector existen los segmentos pequeño, mediano, familiar, monovolumen y grande.
Tipo de combustible
Antes de escoger un coche gasolina o diésel es importante saber si en el destino al que vamos hay normativas o políticas restrictivas de circulación, como las Zonas de Bajas Emisiones. Si optamos por un eléctrico deberemos informarnos sobre los puntos de recarga de que dispondremos.
Saber la política de combustible
Hay que conocer cómo recibiremos y tendremos que devolver el depósito para evitar sorpresas o confusiones. Lo más habitual es recibirlo lleno y repostar justo antes de devolverlo para entregarlo en el mismo estado.
Elegir el seguro adecuado
Según la tranquilidad que queramos tener y lo que estemos dispuestos a pagar podemos escoger un seguro a todo riesgo, con franquicia, con franquicia con robo, de Responsabilidad Civil a terceros, de accidentes personales o de asistencia en carretera.
Informarnos sobre la franquicia
Debemos informarnos sobre la cantidad que abonaríamos en caso de causar daños al vehículo durante el periodo de alquiler, pues se trata de una cantidad variable que el titular de la reserva deberá abonar en caso de que al vehículo, durante la duración del contrato, le ocurra algún tipo de desperfecto.
Mirar la política de cancelación
Es importante conocer las condiciones y requisitos de cancelación de la compañía de alquiler por si surge un imprevisto o modificación de última hora.
Revisar previamente el vehículo
Antes de iniciar el viaje, es recomendable inspeccionar el interior y exterior del vehículo y comparar lo que vemos con la hoja de fallos proporcionada por la compañía en la entrega, en la que se especifican, por ejemplo, abolladuras o daños en la carrocería. Si vemos algún desperfecto más deberemos comunicarlo previamente para no tener problemas a la hora de devolver el vehículo. No sería la primera vez que obligan a un cliente a abonar un daño que se encontraba previamente en el coche pero que no estaba señalado.
Considerar una serie de extras
Contratar como extras un dispositivo GPS o un sistema de retención infantil pueden ser interesantes para mejorar notablemente la seguridad y la comodidad durante el viaje.
Requisitos para alquilar
Las condiciones y requisitos para alquilar un vehículo son varias. En primer lugar contar con una edad mínima de 18 años, aunque algunas compañías fijan su edad mínima y máxima. Además, obviamente, hay que mostrar un DNI (o NIE o pasaporte en el caso de extranjeros), y un permiso de conducción válido. Algunas empresas exigen cierta antigüedad en ese carné para aceptar el alquiler. Por último, es necesario poseer una tarjeta de crédito o débito válida, ya que casi todas las compañías la exigen para realizar el depósito.