El juicio contra los ocho procesados por el sumario 13/13, acusados de pertenecer al frente jurídico de ETA, ha arrancado este lunes en la Audiencia Nacional con la magistrada Angela Murillo rechazando suspender el juicio, como le habían pedido cuatro de los acusados aduciendo que ya habían sido juzgados por pertenencia a organización terrorista.
Se espera que sea en la segunda jornada, que arrancará este martes, cuando se inicie la declaración de los acusados. Eso sí, la jueza ha dejado en el aire esta posibilidad advirtiendo de que uno de los miembros del tribunal, que ha recibido la segunda dosis de la vacuna contra el coronavirus, podría quedar incapacitado, lo que obligaría a "suspender el juicio".
En el primer día del juicio, celebrado en la sede de San Fernando de Henares, el tribunal ha rechazado los argumentos esgrimidos por las defensas de Arantza Zulueta, Jon Enparantza, Julen Celarain y Naia Zuriarrain, que han aludido a dicho principio para pedir que sus representados no fuesen juzgados. En este caso, por pertenencia a organización terrorista en su condición de integrantes de ETA.
Las defensas de los cuatro acusados han denunciado que se está vulnerando el derecho de sus representados a no ser juzgados dos veces por los mismos hechos, señalando que ya fueron condenados en 2019 por integrar el K.T., el órgano coordinador del frente de makos.
Asimismo, la magistrada ha desestimado la petición de la defensa, que solicitaba que el juicio no se retransmitiese por la plataforma de vídeo YouTube para que los testigos no se viesen contaminados por el resto de declaraciones. Así, y pese a comprender "perfectamente" los motivos de la solicitud, la jueza ha recordado que se trata de una "práctica absolutamente generalizada" y ha señalado que la "publicidad" del juicio no puede verse limitada.
PRESENCIA DE LOS ACUSADOS EN EL JUICIO
Además, algunas de las defensas han pedido la dispensa para sus representados, de manera que estos pudieran ausentarse del juicio salvo en el momento de la declaración o de la última palabra. Ha sido el caso de Saioa Aguirre y de Naia Zuriarrain, que han asegurado que tenían que hacerse cargo de sus hijos en esta "etapa vacacional".
La magistrada ha señalado que "no se puede dar permiso total o absoluto" a los acusados "para que no vengan" a la sala, explicando que si el juicio "sigue celebrándose tendrán que" acudir salvo que se lo impidan causas médicas o de atención a sus familiares.
Por último, la jueza ha desestimado la petición de que los agentes de la Guardia Civil que testificaran en el juicio sean desprovistos de su protección en tanto que, "aunque sea cierto o no que ETA ha desaparecido", pueden "existir acciones derivadas" que pongan en "problemas" su labor en ciertas partes del Estado español.
Siete de los ocho acusados se han presentado en la sede de San Fernando de Henares acompañados por una representación de EH Bildu encabezada por su portavoz en el Congreso, Mertxe Aizpurua, y por el diputado en el Parlamento vasco Julen Arzuaga.
Según han confirmado a Europa Press fuentes de la formación vasca, el octavo acusado, Juan María Jáuregui, no ha podido acudir a su cita con la Justicia por razones sanitarias.