Las máquinas entran hoy a la playa de Ondarreta, en Donostia, para comenzar con los trabajos previos de reparación de la grieta de 18 metros de largo, detectada la semana pasada en la base del muro del Paseo Eduardo Chillida, en la zona del Tenis.
Según ha explicado el concejal de Mantenimiento y Servicios Urbanos del Ayuntamiento de Donostia, Carlos García, la grieta ha sido consecuencia de las mareas y los embates del mar en la zona. García ha detallado que "las mareas han retirado muchísima arena y han descalzado el muro", además de mover varias piedras del propio muro. Por ello, añade el concejal, los trabajos de reparación de la grieta consistirán en quitar "las piedras y, en caso de no encontrar piedras en las que apoyarnos, se realizará una zapata de hormigón y se reconstruirá el muro sobre dicha zapata".
El miércoles pasado técnicos del Ayuntamiento de Donostia y del Departamento de Costas del Gobierno español, que es a quien corresponde dar la licencia para estas obras, inspeccionaron los daños. El mayor condicionante para acometer los trabajos de reparación de la grieta es la marea. Así lo destacaba el edil Carlos García quien afirmaba que "para realizar la reparación dependemos de la bajamar y del coeficiente de la marea, siendo la óptima a partir del miércoles o jueves".