La sequía está siendo esta primavera una lacra como ningún otro año. Mientras los 300 pantanos peninsulares deberían estar llenándose la falta de lluvias ha hecho que las reservas de agua estén al 50%, un 26% menos de la media de la última década, según datos oficiales del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Los datos son tan preocupantes que los agricultores ya han advertido de la pérdida de cosechas en verano y algunas expertos no descartan restricciones para el agua de boca en amplias zonas.
El precio del agua para uso doméstico es muy variable en España según las zonas y sus recursos hídricos. Un estudio de la organización de consumidores Facua señala que para una familia media estaría entre 6-7 euros el consumo de los 9 metros cúbicos a 9-11 si el hogar consumo unos 13 metros cúbicos. Esto en las ciudades más baratas como Soria, León o Palencia.
En las más caras como Valencia, Murcia, Cádiz y Huelva sube hasta una horquilla de entre 21 y 29 euros en el primer caso, y de entre 31 y 36 euros en el segundo tipo de consumo.
El agua es ya uno de los recursos naturales más preciados y por ello es conveniente que seamos conscientes de la importancia de ahorrar en nuestro día a día por conciencia ecológica y para que su precio -cada vez más alto- no tenga una gran impacto en la factura mensual o trimestral.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) reflejan que una persona gasta más de 140 litros al día, 4.200 litros al mes. En una ducha de cinco minutos consumes casi un centenar de litros de agua, según datos de la OMS. Al lavarte las manos durante un minuto estás utilizando unos 12 litros de agua, en caso de dejar abierto el grifo.
Cuando tiras de la cadena del inodoro puedes llegar a consumir entre 6 y 15 litros de agua. Tu lavadora puede llegar a consumir 200 litros de agua y el lavavajillas 150. Si lavas los platos a mano dos veces al día utilizas entre 60 litros de agua con el fregadero lleno y 120 si lo haces con el grifo abierto, señala la OCU. Limpiando la casa, lo que es fregar el baño y la cocina consumes unos 10 litros de agua.
Con estos consumos no está de más que tengas en cuenta estos pequeños trucos o sencillos consejos para lograr ambos objetivos de ahorrar en la factura y preservar un bien cada vez más escaso.
- Ducha antes que baño. Siempre es mejor ducharse que bañarse ya que un baño requiere unos 200 litros y un ducha, como máximo la mitad. Y si es rápida, una cuarta parte.
- Grifos eficientes. En ocasiones los grifos muy antiguos derrochan gran cantidad de agua por su tecnología anticuada. Nu dudes en cambiarlos si es necesario.
- Cierra el grifo. Hay muchas personas que lo dejan abierto durante su aseo personal o en el fregadero de de la cocina, con lo que se desperdicia innecesariamente gran cantidad de agua. Repara a la mayor brevedad cualquier fuga, ya que aunque pierda poca cantidad la pérdida es constante y al final acaba sumando muchos litros.
- Llave de paso. Cierra levemente la llave de paso general bajarás la intensidad del caudal y a lo largo de los meses ahorrarás una cantidad considerable de agua.
- Reutiliza. En ocasiones puedes reciclar el agua no muy sucia o la que desperdicias hasta que empieza a salir caliente para otros menesteres como fregar el suelo o para regar plantas.
- Dispositivos en el grifo. Si no quieres o no tienes presupuesto para un grifo nuevo siempre puedes optar por instalar dispositivos de ahorro como limitadores de caudal que reducen el volumen de salida y permite ahorrar hasta un 50% de agua para no abrir el grifo a su máxima potencia de caudal cuando no es necesario (su precio es muy asequible, entre 3 y 10 euros por grifo); aireadores que mezclan aire con el agua incluso a baja presión; difusores para rebajar la presión del chorro; e interruptores de caudal con detector electrónico de presencia o mediante un temporizador. Estos dos últimos ese usan a menudo en los baños de grandes establecimientos, hostelería o empresas con programas de consumo eficiente.
- Plantas. Riega las plantas por la noche o al amanecer, especialmente en verano, ya que así se evita la evaporación. También existen sistemas caseros de riego que ahorran agua en el caso de tener muchas plantas y una vivienda grande o con jardín.
- Inodoros eficientes. Instala una cisterna de doble pulsador para utilizarla en función del uso que le des y que consume unos 3 litros la descarga pequeña y 6 la grande. Un truco casero es introducir una o dos botellas de agua de 0,5 llenas dentro de la cisterna para ahorrar en cada descarga.
- Papelera en el baño. Este accesorio evitará que utilices el inodoro como cubo de basura al que tirar muchos desechos y ahorrar muchos litros de agua a la semana.
- El lavavajillas gasta menos. En contra de lo que mucha gente cree se ahorra más agua utilizando el electrodoméstico que haciéndolo a mano.
- Electrodomésticos eficientes. Pon la lavadora y lavavajillas con la carga completa y utiliza los programas adecuados en función del tipo y grado de suciedad. Utiliza este tipo de aparatos con la tecnología más eficiente posible para ahorrar a largo plazo.