El Gordo de la lotería de Navidad es un premio muy especial, tanto por la fecha del sorteo, el 22 de diciembre marca el inicio de las fiestas navideñas, como por el hecho de que el dinero con el que está dotado acabe siempre muy repartido.
A estas alturas, tú ya sabes si estás en el grupo de los que, pese a la frustración, un año más vuelven a celebrar la salud, ¡que no es poco!, o si, como tantas veces has soñado, por fin has resultado tocado por la suerte.
Pues bien, si este último es tu caso debes ser consciente de que el Gordo puede traer muchas cosas buenas y otras no tan buenas. Ser rico no siempre es fácil, ya que obliga a tomar decisiones importantes, y que lo llevemos mejor o peor va a depender en buena parte de nosotros y de cómo lo gestionemos emocionalmente.
Este premio implica grandes cambios en la vida de los afortunados y es mejor estar preparados para ello. Inmaculada Martínez, psicóloga de Doctoralia, señala que las circunstancias personales, la etapa vital de cada uno o la medida en la que ese dinero vaya a cambiar la vida van a ser fundamentales en la respuesta emocional.
La psicóloga asegura que si se gestiona bien, el premio puede suponer un alivio económico importante, aportando seguridad financiera y aumentando el bienestar emocional. También permitirá cumplir sueños que de otra forma nunca se materializarían, como ese viaje que todos ansiamos pero que nunca nos decidimos a hacer.
Sin embargo, la lluvia de millones también puede convertirse en una fuente de problemas. Estos suelen estar vinculados a una mala gestión del dinero o a los cambios en las relaciones sociales. A veces es difícil discernir entre quienes se acercan por verdadera amistad o por un interés económico. La petición de ayuda por parte de familiares o amigos puede generar estrés y malestar, provocando conflictos y modificando las relaciones.
Claves para sobrevivir al 'Gordo'
Así, como en cualquier cambio repentino que puede afectar a la vida, la gestión emocional es fundamental. Para ello, Inmaculada Martínez ofrece algunos consejos:
1- Tiempo para reflexionar. No tomes decisiones aceleradas sobre cómo vas a utilizar el dinero y dedica un tiempo a asimilar tu nueva situación, así como a pensar la forma en la que vas a integrar ese cambio en tu vida. Mantén la cabeza fría y una vez que haya pasado la borrachera emocional planifica paso a paso el buen uso que le vas a dar a ese dinero.
2- Prudencia. Aunque el cuerpo te pida pregonarlo a los cuatro vientos, más vale ser prudente y mantener el anonimato. De esa forma evitarás presiones a la hora de decidir qué hacer con tu dinero, peticiones de ayuda y posibles estafas. Pasado un tiempo podrás contárselo a quien realmente consideres que debe saber una noticia como esa.
3- Discreción. En contra de la tradición, lo más recomendable es no aparecer por el lugar donde compraste la lotería donde siempre hay una gran expectación por conocer quiénes son los afortunados.
4- Asesoramiento profesional. Si te ha tocado mucho dinero, rodéate de personas de confianza y de profesionales que sepan aconsejarte bien sobre qué hacer con él.
5- Mantén el orden. Procura seguir con tu estilo de vida habitual. Una forma de mantener el equilibrio es tener bien distribuido y organizado tu tiempo. La sobredosis de alegría inicial puede dejar paso a la decepción o a los sentimientos de culpa o de infelicidad por no estar bien después de haber resultado agraciado.
6- Sé asertivo. Puede que familiares, amigos o conocidos tengan una cierta expectativa acerca de recibir alguna ayuda económica por tu parte. Trabaja la asertividad, esa habilidad que te permitirá expresar de forma adecuada, sin hostilidad ni agresividad, tus emociones frente a los otros.
Ahora ya lo sabes, ser millonario es el sueño de muchas personas, pero si no se toman las decisiones adecuadas y no se actúa con la debida sensatez puede acabar siendo una pesadilla.