El Gobierno de Portugal ha aprobado este jueves un paquete de medidas valoradas en 900 millones de euros para atajar la crisis de vivienda, con un papel central del Estado, beneficios fiscales, limitaciones a los pisos turísticos y el fin de las Golden Visa.
El plan trazado por el Ejecutivo socialista se someterá a debate público antes de iniciar su tramitación parlamentaria, el 16 de marzo.
A continuación, las claves de un plan agrupado en torno a cinco ejes:
Aumentar oferta del mercado de alquiler
- Reforzar la confianza de los propietarios para que alquilen sus inmuebles:
- El Estado se ofrece a alquilar las viviendas disponibles a precios de mercado durante cinco años para subarrendar y asume el riesgo por el propietario.
- Para los alquileres ya existentes, cuando haya al menos tres meses de impago, el Estado asumirá el alquiler, intentará solucionar la situación del inquilino si hay un problema social o se encargará, en su caso, del desahucio.
- Incrementar la oferta pública con una exención del impuesto a las plusvalías para la venta de viviendas al Estado o los municipios.
- Promover el alquiler accesible:
- Se habilitará una línea de crédito de 150 millones de euros para municipios para financiar obras para llevar vivienda al mercado.
- Incentivos para que pisos turísticos regresen al mercado de vivienda: se prohíben nuevas licencias excepto las rurales en municipios despoblados; las vigentes se revisarán en 2030; se crea una tasa extraordinaria para estos propietarios y habrá beneficios fiscales para quien, hasta 2024, cambie su piso turístico al mercado regular.
- Otros incentivos fiscales para viviendas en régimen de alquiler accesible, como tasa cero del impuesto de trasmisiones y del impuesto sobre bienes inmuebles.
- Será obligatorio alquilar las casas desocupadas durante más de un año (hay unas 730.000).
- Rebajas fiscales para el régimen de alquiler accesible y para promover la estabilidad de los contratos.
Combatir la especulación
- Fin de las concesiones de nuevas Golden Visa.
- Los visados ya concedidos sólo se renovarán si las inversiones inmobiliarias se dedican a vivienda permanente para el propio inversor o sus descendientes o si se coloca en el mercado de alquiler de forma duradera.
- Se limitará el precio del alquiler para los nuevos contratos, que se calculará teniendo en cuenta valores de contratos anteriores y actualizaciones bajo criterios ligados a la inflación.
Apoyar el pago de hipotecas y alquileres
- Exención del impuesto sobre las plusvalías de amortización de las hipotecas para las viviendas propias y de descendientes.
- Los bancos deberán ofertar de forma obligatoria hipotecas a tipo fijo.
- Habrá medidas de protección frente a las subidas de los tipos de interés que pueden ir hasta los 720 euros anuales.
- El Estado concederá subsidios de hasta 200 euros al mes para garantizar que la tasa de esfuerzo no supera el 35 % a familias con ingresos mensuales de hasta 2.700 euros.
Aumentar oferta de vivienda
- Se alterará el uso de terrenos y edificios de servicios o comercio para destinarlos a vivienda.
- El Estado cederá terrenos o edificios a cooperativas y entidades del sector privado para que desarrollen vivienda a costes accesibles.
Simplificar licencias
- Los proyectos dejan de estar sujetos al licenciamiento municipal y se obtendrá la licencia bajo una declaración de responsabilidad del proyectista.
- Habrá penalización financiera para las entidades públicas que incumplan los plazos legales para conceder licencias.