Las tiendas de ropa y complementos de segunda mano han existido siempre, pero desde hace unos años se han trasladado con enorme éxito a las webs y aplicaciones de móvil. Unas plataformas que permiten que millones de personas pongan a la venta esas prendas que ya no les gustan, que se les quedaron pequeñas, que compraron y nunca estrenaron o que fueron un regalo que no les gustó. Una manera de sacarse un dinero y de reutilizar unos productos que todavía tienen vida útil y a los que otras personas pueden acceder por un precio más asequible que el original.
Normalmente los productos a la venta se muestran con fotografías, medidas y descripciones para que el comprador se haga una idea lo más aproximada posible de en qué condiciones se encuentra esa prenda que va a adquirir, pero a veces hay sorpresas y puede pasar que reciba un producto mucho más desgastado de lo que parecía, sucio o con un color que dista bastante del que se veía en las imágenes.
Más raro es que el vendedor envíe, por error, un producto diferente al que el comprador adquirió. Es lo que le ha sucedido a un joven gaditano y que ha compartido con los internautas en la red social X (anteriormente Twitter), lo que ha llevado a que su historia se convierta en viral. El usuario @Busati333 adquirió un chándal de la colección que el cantante C Tangana lanzó para Bershka en el año 2021. Pagó por él 20 euros a la vendedora, pero para su sorpresa no llegó esa prenda ni nada que se le pareciera: “Me he pedido un chándal por Vinted y cuando abro el paquete veo que me ha llegado una bandolera del paleolítico”, escribe el comprador en Twitter, haciendo referencia a una especie de maletín muy viejo.
Rápidamente se puso en contacto con la vendedora e inició el proceso de devolución, aunque sin demasiado tacto. “Pero esto qué cojones es”, le escribió.
La vendedora no tardó en disculparse y de ofrecerle un gran descuento por el chándal. “Tío perdona, me acabo de dar cuenta que mi madre se ha confundido de paquete, lo siento muchísimo. Te envío el chándal por 9 euros, por favor devuelve el paquete y te envío el chándal mucho más barato. Mi madre se ha confundido cuando han venido a recogerlo”.
El comprador adoptó entonces una actitud que no ha gustado a muchos internautas, ya que cuando se produce un error por parte del vendedor la devolución es gratuita para el comprador, a quien no le supone ningún gasto, más allá de la incomodidad de tener que hacer la devolución. “El chándal por 5 euros, vamos”, escribió, exigiendo una rebaja del 75%. “Vale”, aceptó la vendedora.
Quizá por las críticas recibidas, el comprador acabó renunciando al chándal. “Oye mira, te devuelvo el paquete tuyo pero no hace falta que me rebajes el chándal, vale, quédatelo. Con que se me devuelva el dinero...”.
Tras ver las conversaciones, un tuitero decidió escribir directamente a la vendedora para recomendarle que no aceptara las exigencias del comprador de rebajarle el precio del chándal, y compartió la respuesta de ella. “Estoy esperando de buena fe a ver si me devuelve la maleta. Espero que sí, si no tendré que denunciar. Y por supuesto que el chándal no se lo voy a vender!!”.