Hablar de la Comunitat Valenciana nos lleva a pensar directamente en el verano, el sol, la playa, el relax pero cometeríamos un grave error si pensáramos que con perdernos en uno de sus magníficos arenales o con degustar una paella que en ningún otro sitio sabe igual, ya conocemos esta comunidad del Levante. Ni mucho menos. Basta con adentrarse en el stand de Expovacaciones del BEC y escanear su código QR para darse cuenta de que nos queda mucho por descubrir.
En Onda Vasca, la técnico de promoción de Turisme Comunitat Valenciana, María Jover Estellés, nos ha hecho un repaso y de su mano hemos podido comprobar cómo este stand adaptado respecto al que expusieron en FITUR, tiene todo lo que podríamos imaginar. De primeras aglutina a todas las marcas turísticas, a las tres provincias y a las ciudades de Benidorm, Valencia y Alicante. Pero además incorpora una nueva marca turística que es la ciudad de Elche.
Olor a paella en el BEC
El stand consta de 100 m2 y cuenta con un espacio de cocina en vivo donde se realizarán varios showcookings para que los visitantes puedan ver la elaboración de arroces y otros platos de la gastronomía valenciana. "Nos sale muy bien porque tenemos video blogs con talleres sobre cómo se hace una paella o se recolecta la chufa para la horchata´", explica María.
La oferta es "muy amplia" destaca la técnico de turismo que recuerda que serán los formadores de la Red de Centros de Turismo los que organizan las degustaciones de los productos y platos más típicos de la Comunitat Valenciana. "Se ha traído un poco de todo. Van a hacer paella, caldereta, arroz con pato..."
Este es el programa de degustaciones previsto:
No es todo sol y playa
María reconoce que el sol y la playa son el "gancho" para el turista pero también recuerda que "en el mercado vasco la estancia es de diez días" por lo que la oferta se extiende más allá de la costa. "Rutas culturales y dentro del apartado natural rural los agroturismos, el ecoturismo, el birding y dentro del apartado activo deportivo hay muchas ofertas", destaca y pone como ejemplo el turismo ecuestre, la espeleología, las visitas en globo o la sierra Mariola de Alicante.
El mes que dejamos atrás ha sido bueno para la Comunidat Valenciana en cuanto a ocupación porque en Semana Santa se ha llegado al 90%. Un buen preludio de lo que puede llegar en verano a pesar de la incertidumbre y de la inflación que también hace que nos tengamos que ajustar el cinturón. "Las expectativas son buenas. La gente se ajusta pero hay oferta para todos los bolsillos", remarca.