Condena de 22.000 euros a un internauta por atribuir a una ex Miss España un romance con un político

Un juzgado de Primera Instancia de Murcia ha condenado a un internauta a indemnizar con 22.000 euros a la modelo y Miss España 1998, la murciana María José Besora, por incurrir en una intromisión ilegítima en su derecho al honor con la publicación de un montaje fotográfico en el que se insinuaba la existencia de una relación sentimental con un político.

Durante la vista oral, celebrada en la Ciudad de la Justicia de Murcia, la demandante recalcó que la publicación, en 2014, de la fotografía en el muro del demandado en una red social le produjo un gran daño económico y, sobre todo, moral, al ser falsa aquella supuesta vinculación amorosa.

Durante el juicio, en el que la modelo y actriz ha sido defendida por el letrado Pablo Ruiz Palacios, la representante de la Fiscalía se adhirió a su solicitud de condena al considerar que la inserción de las imágenes por el demandado suponía una vulneración de su derecho al honor.

Como testigos declararon en la vista oral el representante artístico de Besora y las amigas de ésta que descubrieron la publicación en la red social y que lo pusieron en conocimiento de la misma, así como el funcionario policial que llevó a cabo las investigaciones oportunas para descubrir la identidad del autor de los hechos.

Por su parte, éste negó haber colgado la composición fotográfica que se le atribuía y explicó que los hechos pudieron haber sido llevados a cabo por cualquier otra persona.

En declaraciones a EFE efectuadas en la antesala del juzgado, María José Besora manifestó que acudió a los tribunales en defensa de su honor, que consideraba había sido mancillado con aquella publicación, que tachó de completamente falsa en lo que parecía que quería dar a entender y que le ha generado a lo largo de todos estos años un gran sufrimiento.

Besora añadió que quería dejar bien claro que lo que ha conseguido en su trayectoria profesional había sido por su esfuerzo personal y dedicación, no por la relación con un político gobernante que, además, según insistió, nunca llegó a existir.