La Audiencia Provincial de Álava ha decidido condenar a 10 años de prisión al joven acusado de matar a puñaladas durante una discusión al novio de su expareja sentimental en Gasteiz, en la calle Flandes.
El sentenciado, además, deberá hacer frente al pago de 175.000 euros en concepto de responsabilidad civil a la pareja y padres del finado y a otro pago de 4.095 euros para hacer frente al traslado de los restos del fallecido a su lugar de origen. Esta sentencia, según informan fuentes judiciales consultadas por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, no es firme y cabe recurso ante la sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.
Durante el juicio, el ya sentenciado aseguró que no quería causarle la muerte a la víctima, solo hacerle un "corte" en el brazo porque le había "humillado" y agredido.
Durante las últimas semanas se ha llevado a cabo en la Audiencia Provincial de Álava el juicio con jurado popular contra este joven para quien la Fiscalía y la acusación particular que representa a la familia de la víctima solicitaban 12 años y medio cárcel por un delito de homicidio. La defensa discrepaba y mantenía que el acusado no tenía intención de matar y que en todo caso podría tratarse de un delito de lesiones en concurso con un homicidio imprudente.
Cogió la navaja por miedo
El acusado reconoció durante su declaración que conocía a la víctima, que sabía que estaba con su expareja pero insistió en que él no tenía intención de matarle cuando le asestó la puñalada. Solo quería hacerle un "corte" en el brazo porque le había "humillado" y le había agredido durante una discusión, ha sido su versión.
El joven explicó que no era la primera vez que tenía una pelea con la víctima y que el día de los hechos el fallecido fue el que le buscó y le emplazó a salir de su casa donde se había escondido para evitarle, ya que no quería "problemas" . Reconoció que antes de salir de la vivienda cogió por "seguridad" y por "miedo" una navaja que escondió en un bolsillo del pantalón y relató que la víctima, que estaba acompañado de otras personas, le agredió, le insultó y le "humilló".
El acusado explicó que cuando le apuñaló, su intención era hacerle un "corte" en el hombro, que no vio dónde le alcanzó porque en ese momento la víctima le propinó un golpe y que huyó del lugar por miedo pero pensando que no le había matado, algo que supo horas después cuando fue detenido.