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Confebask cree que Euskadi "salvará la recesión" y prevé que en 2023 crezca un 1,5%

La patronal vasca prevé más empleo, pero a un menor ritmo de creación, con un aumento de 10.000 afiliados y una tasa de paro del 7%
La presidenta de Confebask, Isabel Busto, durante la presentación del informe anual.

Confebask cree que Euskadi "salvará la recesión" desde el punto de vista de crecimiento anual y estima que la economía vasca crecerá en 2023 en el entorno del 1,5%, aunque se constata una desaceleración en el ritmo de crecimiento y, en función de la evolución de las distintas incertidumbres, puede oscilar entre el 0 y el 2,5%. Por otra parte, prevé más empleo, pero a menor ritmo de creación, con un aumento de 10.000 afiliados y una tasa de paro del 7%.

La presidenta de Confebask, Isabel Busto, ha dado a conocer estas previsiones en una rueda de prensa celebrada en Bilbao, en la que también han estado presentes el director general de la patronal, Eduardo Aretxaga, y su responsable de Economía, Pablo Martín, en la que han precisado que, en todo caso, los pronósticos se "ven condicionados por una altísima incertidumbre".

En su comparecencia, Busto ha precisado que para el año que viene estiman que la economía vasca crecerá en el entorno del 1,5%, en "cotas superiores" a la media europea y también por encima de la economía española.

No obstante, ha insistido en que existen "numerosas e importantes incertidumbres" que, en función de cómo evolucionen, pueden hacer que el crecimiento final pueda oscilar en una horquilla entre el 0% y el 2,5%.

El director general de Confebask, Eduardo Aretxaga, ha añadido que el escenario "central" que manejan es que Euskadi "salvará la recesión" desde el punto de vista de crecimiento anual, pero hay que monitorizar "trimestre a trimestre" la evolución porque el escenario cambia "rápido" y, a veces, "de manera radical". "Será un año de crecimiento reducido", ha insistido.

PERSPECTIVAS EMPRESARIALES

Además, en la comparecencia se ha remarcado que las perspectivas empresariales para 2023 adelantan "una desaceleración del ritmo de crecimiento económico", ya que, comparativamente con el año anterior, los resultados de las encuestas realizadas por Adegi, Cebek y Sea, dicen que las empresas prevén para los próximos meses "un empeoramiento de la situación económica" con una cartera de pedidos "más débil" que este 2022. Son más las empresas que ven el mercado en los próximos meses en recesión que en reactivación.

Isabel Busto ha subrayado que crece de manera importante la preocupación por el "fuerte crecimiento" de los costes, principalmente energéticos, y la reducción de la rentabilidad, por lo que las empresas piden medidas "para paliar la delicada situación actual" como, por ejemplo, bonificar los costes energéticos o reforzar y agilizar los programas y ayudas para las transiciones digital y energética, incluidos los Fondos Europeos.

A juicio de la patronal, se está en un "shock energético" que hace que suba el precio de la energía y Pablo Martín ha apuntado que se está produciendo una "pérdida de competitividad" de Europa porque sus precios energéticos crecen "más que en el resto del mundo".

Otra de las preocupaciones que aumenta es el de la financiación y, aunque no es el "principal elemento de preocupación", puede ser un "nivel de riesgo añadido que no se tenía antes", según ha apuntado Eduardo Aretxaga, quien ha agregado que no hay problemas de morosidad o de impagos pero es un "elemento que no va a ayudar" porque "va a suponer un aumento de los costes financieros empresariales".

Por lo tanto, se prevé que la desaceleración de la economía vasca continuará en 2023 y todos lo sectores moderarán su crecimiento. El mayor aumento se dará en el sector de servicios de mercado, mientras que la industria mostrará el incremento "más débil" y prevé dificultades para competir en mercados no europeos.

Isabel Busto ha afirmado que el próximo año va a plantear "importantes retos económicos y empresariales" y será "clave saber manejar un escenario de bajo crecimiento con una inflación todavía elevada para asegurar la competitividad y sostenibilidad de las empresas" y que "va a costar bajar".

"Tendremos que buscar el punto de equilibrio para ver cómo compaginamos la necesidad de realizar inversiones que nos permitan seguir en el mercado, y acometer las transiciones en marcha con una rentabilidad empresarial a la baja", ha dicho.

Por su parte, la economía mundial en 2023 se seguirá desacelerando y, en concreto, en EEUU y en la zona euro se prevén crecimientos "muy bajos, de apenas unas décimas" y recesión en países como Alemania y Reino Unido. En el caso de España, moderará su crecimiento, pero seguirá en el "rango alto del crecimiento en Europa".

MERCADO LABORAL

En relación al mercado laboral, Busto ha precisado que, aunque para 2023 se prevé una "reducción del ritmo de creación de empleo", estiman un aumento de 10.000 afiliados más a la Seguridad Social para llegar a un nuevo "récord y máximo histórico superando el millón de cotizantes", y con una tasa de paro del 7%, la más baja de los últimos 15 años", lo que es "una muy buena noticia" y supone "un nivel medio europeo".

En este sentido, el responsable de economía de Confebask, Pablo Martín, ha explicado que el próximo año será posible seguir creando empleo, pese al menor crecimiento, porque las reformas realizadas permiten que "creciendo menos se pueda crear empleo".

Isabel Busto ha añadido que 2023 será "un año exigente, especialmente durante el primer semestre, con una fuerte presión de los costes, tanto energéticos, salariales y de suministros, y con "márgenes todavía muy reducidos", pero ha subrayado que la mayoría de las empresas apuesta por mantener el empleo.

BALANCE 2022

En relación al actual ejercicio, según la previsión de la patronal, Euskadi cerrará 2022 con un crecimiento de la economía del 4,2%, punto y medio por debajo de la estimación realizada hace un año, debido a la situación generada por la guerra de Ucrania, los costes energéticos y la alta inflación y tras registrarse un segundo semestre de crecimiento casi plano.

Isabel Busto ha detallado que, por sectores, destaca el crecimiento de los servicios de mercado, gracias a que, una vez superadas las restricciones de la pandemia, se han recuperado actividades como el turismo, la hostelería y el ocio.

Por su parte, la industria ha crecido "a buen ritmo", aunque ha apuntado que está acusando un aumento de costes "sin precedentes", mientras que la Construcción "vuelve a ser el sector que menos crece" con problemas de costes "disparados, que han paralizado proyectos de licitación pública, y de falta de mano de obra".

También se ha constatado un aumento del consumo privado y la inversión, pero acusan el efecto de la inflación y el "bajo ritmo" de la llegada de los fondos europeos.

Isabel Busto ha señalado, por otra parte, que las exportaciones se sitúan ya en los niveles prepandemia, aunque el superávit comercial se reduce un 35% hasta octubre, "por la elevada factura energética".

Con esta coyuntura, ha afirmado que, "a pesar de todo lo vivido", la economía vasca ha seguido creando empleo y cree que se cerrará 2022 con 15.000 afiliados más (+1,5%), incluso con "un récord de cotizantes".

No obstante, ha advertido de que se observa "una progresiva desaceleración en la creación de empleo", lo que no impedirá cerrar este año con una tasa de paro del 8%.

"Podemos decir que, en términos económicos, 2022 ha sido un año peor de lo inicialmente previsto, pero también es verdad, que ha finalizado mejor de lo que se esperaba, después de producirse la invasión de Ucrania", ha señalado.

El responsable de Economía, Pablo Martín, ha indicado que, en el caso de la economía española, ha estado "a la cabeza del crecimiento de la economía en Europa".

Por último, Confebask ha subrayado la aportación de los empresarios "al bienestar colectivo", mediante las inversiones, el empleo y el pago de impuestos. "Nos sentimos muy orgullosos de nuestra contribución a la sociedad vasca", ha apuntado.

24/12/2022