Contenido pornográfico, homófobo, machista y fascista se compartía en los dos grupos de whatsapp con más de mil menores que investiga la Ertzaintza en Donostia a raíz de la denuncia hecha pública por el colegio Aldapeta María Ikastetxea, que estudia medidas colectivas y apoyar a los afectados.
José Eizmendi, director de este centro concertado, el más grande de Gipuzkoa, ha asegurado este miércoles en declaraciones a los periodistas que el colegio se reunirá este mediodía con agentes de la Ertzaintza para saber cómo actuar y si puede interponer una denuncia.
Eizmendi ha explicado que se trata de dos grupos de whatsapp, creados con los nombres "meter gente hasta que nos hagamos famosos" y "hasta llegar al millón", en los que se colgaban "fotografías" pornográficas y mensajes "totalmente inapropiados", "insultantes", "sexistas" y "vejatorios".
Ha señalado que estos grupos parece que están "muy extendidos por otros colegios" de Donostia ya que en uno de ellos hay más de mil menores.
Investigan si el grupo llegó a Primaria
Aldapeta María Ikastetxea ha constatado la presencia de cerca de 200 alumnos del centro en estos dos canales, la mayoría parece que son de primero y segundo de la ESO, aunque también hay alguno de tercero e incluso de Bachiller. Ahora investigan si ha llegado también a Primaria.
Ha precisado que en uno de los grupos hay "cinco teléfonos como administradores", uno de los cuales tiene un origen extraño y puede incluso que esté generado con "inteligencia artificial", según les ha indicado la Ertzaintza y los otros, desde luego, "no pertenecen a personas del colegio".
El centro está tratando este asunto en las aulas y ha remitido una circular a las familias a las que aconseja el modo de proceder en el caso de detectar la presencia de un menor en estos grupos: salir del chat, no borrar los mensajes y acudir a la Ertzaintza.
Ha animado a las familias a apoyar iniciativas como restringir el uso del móvil hasta los 16 años o, si es totalmente necesario entregarlo antes, controlar su uso y el tiempo de utilización.
El centro, el más grande de Gipuzkoa, tuvo conocimiento de estos hechos a través de la denuncia de una madre e inició entonces una investigación, que ha puesto en conocimiento de la Ertzaintza.
El colegio ha llamado "una por una a las familias" de los chavales implicados para explicarles cómo actuar y recomendarles que "se sentaran tranquilamente con sus hijos", vieran el contenido, comprobaran también si habían escrito en estas conversaciones y les explicaran que "esto se habla con la Ertzaintza que les va a ayudar".
Ha insistido en la importancia de actuar con "rapidez y transparencia" ante estos casos, que ya se han "repetido" en otras comunidades autónomas.