El Ejército de Corea del Norte ha lanzado este jueves, madrugada del viernes ya en Pyongyang, un misil balístico no especificado hacia el mar de Japón --conocido como mar del Este en Corea del Sur--, según han denunciado fuentes militares surcoreanas.
Así lo ha confirmado el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, si bien no ha ahondado en más detalles, tal y como recoge la agencia de noticias surcoreana Yonhap. Medios japoneses señalan que el lanzamiento se ha registrado en torno a las 2.00 horas (hora local) y que tanto Seúl como Estados Unidos ya recopilan información sobre lo ocurrido.
Este lanzamiento se ha producido después de que una decena de aviones militares norcoreanos sobrevolasen de forma amenazante territorio cercano a la frontera con Corea del Sur. Estas maniobras fueron respondidas por Seúl con el despliegue de cazas F-35 a la frontera y otros activos militares.
La nueva escalada del conflicto ha recibido rápidamente la respuesta del Ministerio de Defensa japonés, que ha acusado a Pyongyang de "intensificar unilateralmente" las tensiones. "Es inaceptable", ha dicho el ministro de Defensa, Yasukazu Hamada.
El primer ministro nipón, Fumio Kishida, ha convocado una reunión del equipo de emergencia con el fin de recopilar toda la información posible sobre lo ocurrido y confirmar los posibles desperfectos que haya podido ocasionar el misil norcoreano, según apunta la radiotelevisión japonesa NHK.
Ya el miércoles el propio líder norcoreano, Kim Jong Un, supervisó el despliegue de dos misiles balísticos de largo alcance, que han sobrevolado las aguas del mar de Japón para finalmente dar en el blanco, a 2.000 kilómetros de distancia.
En las últimas semanas Corea del Norte ha lanzado varios misiles balísticos en ensayos prohibidos por resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, en respuesta a las maniobras militares estadounidense-coreanas que considera un ensayo de invasión.
En la madrugada del 4 de octubre, Pyongyang lanzó un misil balístico de alcance intermedio que sobrevoló territorio de Japón para caer en el océano Pacífico, fuera del espacio aéreo nipón, hecho que no ocurría desde 2017.