El embrollo del Consejo General del Poder Judicial y de la renovación pendiente en los órganos de Justicia preocupa cada vez más en el Ejecutivo español que, a falta del resultado de las conversaciones que se han rematado con el PP, aprecia un deterioro en el prestigio del sistema judicial y la magistratura en su conjunto.
La dimisión de Carlos Lesmes al frente del CGPJ y del Tribunal Supremo no ha sido más que el último capítulo de un enredo que se prolonga ya por espacio de cuatro años y en el que la falta de acuerdo político ha terminado por pasar una gran factura al prestigio de la Justicia española, que se encuentra ahora bajo mínimos. Es por ello que desde Moncloa ya muestran abiertamente la preocupación por una situación crítica que creen que no puede prolongarse por más tiempo.
En esa línea, ayer el secretario de Estado de Justicia, Tontxu Rodríguez, afirmó que la situación generada en el Consejo General del Poder Judicial es “insostenible”, y por ello advirtió de que “el Poder Judicial es un poder del Estado y ahora mismo está absolutamente desprestigiado”.
En una entrevista a Radio Popular, el exalcalde de Barakaldo se refirió a la situación que vive el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y a la decisión de designar a Rafael Mozo como presidente interino tras la renuncia de Carlos Lesmes al frente del órgano de Gobierno de los jueces.
A su juicio, lo que se está viviendo es “tremendo”, ya que “después de cuatro años se sigue con un bloqueo del Consejo y la situación es insostenible”.
“Carlos Lesmes se ha ido y tengo que contenerme en aras al acuerdo para que se renueve el Consejo. La dimisión no le ha salido tan bien como pudiera pensar y creo que es la última oportunidad”, afirmó Rodríguez, al tiempo que confió en que se logre un acuerdo pronto.
No obstante, rechazó que la justicia se vea por ello paralizada ya que “los más de 5.000 jueces que hay en España siguen trabajando muy bien” en sus funciones. “Pero sí es verdad que sus jefes, los del órgano judicial por excelencia, no se han querido ir durante cuatro años y ha habido un bloqueo”, lamentó.
Por todo ello, el dirigente socialista constata que “el Poder Judicial está totalmente desprestigiado” y la renovación debe producirse cuanto antes. “Hay que hacer un esfuerzo para volver a prestigiarlo porque los jueces trabajan diariamente y eso se pierde cuando solo se habla del CGPJ y de las altas esferas”, añadió.
Por último, lamentó que “la imagen de la justicia en España se está deteriorando” tanto “de puertas afuera”, en Europa, como “de puertas adentro”.
“Deterioro institucional”
Por otra parte, la asociación Juezas y Jueces para la Democracia (JJpD) se reunirá el próximo 24 de noviembre con el presidente del Senado, Ander Gil, para trasladar su preocupación por el “deterioro institucional” que ha propiciado la “prolongada” situación de un Consejo General del Poder Judicial en funciones durante casi cuatro años.
Así lo manifestó la asociación en un comunicado, en el que confía en que para entonces se haya renovado el CGPJ y que la reunión se centre en otros aspectos relevantes, como la forma de conseguir mayor transparencia en el proceso para designar sus vocalías o posibles soluciones para evitar que “se vuelvan a producir situaciones de prolongada interinidad como las que estamos viviendo”.
Además, los representantes que acudirán a la reunión pondrán sobre la mesa la preocupación de esta asociación por los problemas que la ciudadanía y los profesionales sufren por deficiencias de la administración de justicia, como la demora en la celebración de actuaciones judiciales o la sobrecarga de trabajo de algunos tribunales.
También se entregarán al presidente del Senado las resoluciones de los últimos congresos de Juezas y Jueces para la Democracia que proponen reformas legislativas.